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jueves, 13 de febrero de 2020

ACTUALIZACIÓN de la familia GALÁCTICA y ANGELICAL


ACTUALIZACIÓN DE ASH’TAR’KA’REE, Y DE LA FAMILIA ESTELAR Y ANGELICAL SOBRE LA DUODÉCIMA HORA    Hermanos y Hermanas:     Trabajadores de la Luz, Trabajadores de la Red, y Trabajadores de la Puerta, como Maestros Espirituales de Gaia, han nacido de su Útero Divino.  Somos su Familia Estelar y queremos expresarles que la duodécima hora del Arco de Ascensión de Gaia está pronto a llegar sobre ustedes en su Eterno Ahora.

ACTUALIZACIÓN DE ASH’TAR’KA’REE, Y DE LA FAMILIA ESTELAR Y ANGELICAL SOBRE LA DUODÉCIMA HORA

Hermanos y Hermanas:
Trabajadores de la Luz, Trabajadores de la Red, y Trabajadores de la Puerta, como Maestros Espirituales de Gaia, han nacido de su Útero Divino.
Somos su Familia Estelar y queremos expresarles que la duodécima hora del Arco de Ascensión de Gaia está pronto a llegar sobre ustedes en su Eterno Ahora.
Queridos corazones, esto significa, que en el cuerpo planetario de Gaia han estado fluyendo poderosos cambios durante varios meses de su tiempo lineal local de este Ahora.
Nuestro mensaje es que la Tierra cambió a la ‘Undécima Hora’ durante el Portal Estelar 11:11:11, del día 11 de noviembre de 2011.
Esto allanó el camino para otro cambio muy significativo, para el comienzo del pase a la Duodécima Hora, durante el Solsticio de junio de 2019.


El Portal Estelar de la Duodécima Hora, simboliza a las etapas de la Ascensión planetaria en las que están actualmente.
La comprensión de la Hora 12 se traduce en el plano de la Tierra, a través del marco del espacio-tiempo local, y con este ejemplo, nos estamos refiriendo a un reloj con ambas manecillas que apuntan a las 12, para su mayor comprensión de este proceso.
La posición de las manecillas en el reloj, es el ‘verdadero Norte de la Ascensión Planetaria de Gaia’, por así decirlo.
Entonces tienen que mirarlo como un reloj que marcará las 12, o repicará 12 veces, en el momento de la Duodécima Hora.
Así es como se traduce esta expresión a través del tiempo terrenal, cada repiqueteo que repercute en la Rejilla de Luz de Gaia, es la resonancia de las capas de otro nivel de Luz dimensional superior.
Desde nuestra perspectiva, la Duodécima Hora es lo que muchos llaman El Evento, Destello Solar, u Onda de Amor.
Como saben, este clímax de la ola de Amor golpeará al planeta en el Ahora y en este momento están en este flujo.
A medida que esta ola de Amor avanza, va colocándolos en otro nivel de la Luz dimensional superior, a través de las 12 campanadas, hasta que se produzca el golpe 12, de la Hora 12, o el Flash Solar.

En ese momento El Evento será visto y sentido en todo el planeta, por toda la humanidad, como un instante vibratorio de claridad colectiva, que se volverá tangible, visible y palpable alrededor de toda la Tierra, les significará la apertura masiva de la Consciencia del Corazón.
Esto está en relación con lo que algunos llaman ‘Punto de Inflexión’ o ‘Destello Solar’, que también es descrito metafóricamente por la Familia Estelar como un ‘Evento de Onda Estacionaria’.
Esto es cuando todas las capas de las frecuencias de Luz entran en un formato armónico particular, de coherencia total, que está listo para recibir el pulso de la Ascensión desde el Centro Galáctico.

En ese momento resonarán los 12 repiques de la Hora Doce.

En ese momento se desarrollará el florecimiento natural de la Ascensión de la Tierra, que será completamente inquebrantable, a más allá de la influencia o el alcance de cualquier Energía negativa de una vibración distorsionada.
Esto significa que cuando ocurra el Destello Solar, esta patada dará comienzo a la Ascensión completa para toda la comunidad no despierta.
Lo que significa que las Energías negativas no podrán proyectar su continua procrastinación o aplazamiento hacia la Ascensión de Gaia y la humanidad.
Entonces comenzarán a fluir como un mar sin fin, entonces sentirás a cada repiqueteo de la Duodécima Hora, como el toque de una campana.

Estará el tono de llamada inicial, luego ese tono irá reverberando a medida que cada timbrazo vaya expandiéndose en la campana.
Por lo tanto, con cada una de estas campanadas el tono irá ampliándose y suavizándose, e irá estableciéndose en el Campo de Energía de la Tierra.
Irá orientando al Campo vibratorio del planeta y del colectivo con una coherencia armónica incrementada y reforzada por cada campanada, que se construirá poco a poco, sobre la anterior.
Entonces, les decimos que, en esta secuencia de construcción, el segundo ‘timbre’ llegó a la cima durante la Puerta del León 8:8, del 8 de agosto de 2019.
El tercer timbre llegó a través del Portal Estelar 9:9, del 9 de setiembre de 2019, su resonancia se expandió con breves fases de integración entre sí, hasta la fase de unificación más larga del 3 al 4 de diciembre de 2019.
Durante este timbre hubo una importante Misión de eliminación de Energía roja distorsionada que estuvo en curso hasta el Portal Estelar 11:11, del 11 de noviembre de 2019.
En este Ahora la eliminación de esta Energía se ha ‘completado’ y abrió el camino para que llegara la cuarta campanada de esta duodécima hora, que se inició en el Portal 12:12, del 12 de diciembre de 2019.
Este cuarto timbre se asomó en el Solsticio del 21 de diciembre de 2019, luego culminó en un cambio masivo que tuvo lugar el 12 de enero de 2020.
En este Ahora, ‘esta secuencia trina’ de la Hora 12, se intensificó a través de dos Conjunciones planetarias particulares, que envolvieron los alrededores de la alineación del Solsticio, y que tuvieron lugar el 12 de diciembre y el 12 de enero, mediante Júpiter-Saturno y Saturno-Plutón, respectivamente.

En 2020 repicó el cuarto timbre y la vibración de esta Energía fluyó en los puntos del nodo planetario y continuará ganando impulso durante el resto del año, a través de más alineamientos planetarios, especialmente en el Solsticio y los Equinoccios.
La Familia Estelar les decimos que el quinto timbre de la Hora Doce, se acumulará alrededor del Arco de la Ascensión, el 20 de febrero de 2020.
En el tránsito del día 15, estarán hasta el 17 de febrero, las Energías conjuntas de Neptuno y Venus.
El 20 de febrero ‘finalizará’ el quinto timbre y estará llegando a través de las altas vibraciones del Amor de Venus del 20 de febrero, fluirá en la parte posterior del día de San Valentín del 14 de febrero.
El 20 de febrero habrá un aspecto energético entre Neptuno y Júpiter, y le permitirá al quinto timbre entrar en esta alineación.
Neptuno tiene una relación especial con Venus, estos dos cuerpos tienen un flujo vibratorio de grado 7 y 8.
Entonces, el quinto timbre se completará con la vibración del ingreso de Júpiter, que contará con la ayuda de Neptuno en el Arco de Venus.
Este quinto timbre en 2020, en términos de alineaciones de apoyo planetario y de catalizadores, será una resonancia muy hermosa, mucho más suave que la del cuarto campanilleo de 2019.

El resto de los 8 timbres de los 12 campanilleos, continuarán fluyendo durante el resto de este año, en los poderosos nodos de alineación planetaria de los Equinoccios y Solsticios.
Por ejemplo, el sexto timbre podría acumularse alrededor del Equinoccio de primavera-otoño.
Luego fluirá hacia el 21 de junio de 2020, hacia fines de este mes habrá un Eclipse con un ‘Anillo de Luz’, o un ‘Anillo de Fuego’ que traerá la resonancia del séptimo timbre, que será muy especial, ya que servirá para el posterior anclaje del octavo campanilleo.
La octava vibración se acumulará en el octavo mes, en la Puerta de los Leones 8:8, que fluirá desde la parte posterior del ascenso heliacal de Sirius, que será la patada que dará inició al Gran Ciclo.
Más tarde en el año 2020, Saturno y Júpiter formarán un biquintil, que es un aspecto armónico relacionado con el número cinco y con el movimiento de los planetas en sus posiciones para conformar dos veces la quinta parte de un gran círculo, o en un ángulo de 144º, se podría decir que estará relacionado con la creatividad, con el desarrollo de las nuevas ideas que se plasmarán en el mundo material.
Con Saturno y luego Júpiter formando un biquintil a 144º del Nodo Angélico Verdadero, constituirán a un catalizador energético muy fuerte.
Ambos biquintiles ocurrirán en noviembre de este año, lo cual llevará a las enormes alineaciones de diciembre de la Puerta 12:12, que será seguida el 14 de diciembre por un Eclipse Solar Total.
Luego vendrá la Gran Conjunción del Solsticio, más la conjunción de Júpiter-Saturno a Oº de Acuario que será la terminación del Alfa y Omega en la Nueva Era, será cuando la elíptica del Círculo Dorados se abra para el duodécimo timbre de la Hora 12.
Esta Apertura allanará el camino a la Energía de la Quinta Dimensión, que fluirá hacia a la Tierra, a todos los niveles, no sólo abrazará a los Trabajadores de la Luz y a las Semillas Estelares, sino que lo hará masivamente con TODOS los del colectivo.
Esto abrirá el Camino para el ingreso de la Espiral de Luz de la Ascensión de la 13D al Campo de la Tierra, se anclará en el Corazón de Gaia, también involucrará al ‘Norte Verdadero’, en relación con Polaris y el Polo Norte Celestial, y del Ecuador Celestial.

Para las culturas en la Tierra con diferentes calendarios, los pulsos de Luz Galácticos fluyen a través de diferentes traducciones numéricas, pero la base de la secuencia es la misma detrás de todos los ‘relojes de la Tierra’, ya que desciende desde el Código de la Creación Central 27-72 de esta Galaxia.
La Luz de la Ascensión de la 13D, será la Onda de Amor del Evento y el Catalizador de los Doce Timbres de la Hora Doce.
La Familia Estelar les decimos que PRIMERO DEBEN ver al Evento a través de estas poderosas convergencias, porque a nivel colectivo necesitarán de la apertura a nivel del corazón, para que puedan expandirse.
Así es como abrirán el camino a los aterrizajes masivos de nuestras Naves Estelares, y cuando esto suceda, ustedes podrán liberarse y la Familia Estelar podrá integrarse con la humanidad como una Unidad de Amor.
Podemos ver a esto como una ‘posibilidad’, decimos posibilidad porque depende de los plazos probables para la llegada del timbre doce de la Hora Doce, que probablemente podría llegar a su clímax alrededor del Solsticio invierno verano de diciembre de 2020, para que ocurra el Evento o el Flash Solar que preparará al Pasaje a 2021, equivalente al número 5.
En la numerología, el número 5 es la vibración de la Unidad de la Consciencia Unificada, por lo tanto, podrá verse o sentirse como la Unidad Sagrada de lo Masculino y lo femenino, del Cielo y la Tierra que se unen en la Vesica Piscis.
Cuando miramos el Quintil, el aspecto de 5 puntos de la astrología, es = 72º, por lo tanto, repetimos que el número 5 del año 2021, será una Expresión directa de los Códigos 27-72 y del Sublime Triángulo relacionado con Phi.

¡Esto significa que todo fluirá en una secuencia correcta a lo largo del año 2021!

Posiblemente, en 2021 podrían ver a una completa y positiva Integración con la Familia Galáctica a una escala colectiva.

Si se hace realidad la vibración de la Ola de Amor a finales de 2020, a través del Gran Flash Solar, posibilitará que se realice esta Integración y Divulgación positivas en 2021.

Los ciclos de 2020 harán posible que en este año comience a hacerse realidad sus avances hacia la Edad de Oro.

Por lo tanto, enfoquen sus intenciones de Amor para marcar este inicio, a través del repiqueteo de los 12 timbres.

Entonces mantengan sus intenciones con las frecuencias vibratorias del Amor, para la acumulación de este flujo, así de acuerdo al Plan Divino, puedan llegar a buen término durante este año, hacia la alineación final en el Solsticio invierno verano y al Evento de fines de 2020.

Manténganse enfocados en sus corazones así sostengan a sus intenciones con este Centro para el resto de este año, y a medida que ocurran los grandes cambios y golpes de Energía que los harán fluir hacia la Edad de Oro.

Queridos corazones, por favor, tomen de esta información lo que les resuene y dejen de lado a lo que no les sirva en este momento.

Sepan que Todo Es Amor, entonces manténganse centrados en el corazón y no en el juicio, así consigan mantenerse en la neutralidad de la Unidad.

Les dejamos y compartimos a Toda nuestra Paz y Amor, Somos Ash’Tar’Ka’Ree y su Familia Galáctica, a través de Aurora Athena Ash y de Joanna Fey.




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