Despierten Bellos Durmientes

Heavenletter # 5363 Publicada el 31 de julio 2015

Dios dijo:

Querido, siempre estuviste destinado a Ser, nunca hubo un momento en el que no estés y hayas sido Mi Amado Hijo, sólo que ahora eres Mi Amado y Bello Durmiente.

En este Ahora estoy enviándote claros golpes de Energía para que despiertes y como dicen entre Uds., el resto de tus experiencias sean sólo historia.

Tú y Yo somos una respiración en la cual nos superponemos Uno sobre el Otro, por así decirlo.

Somos Unidad, Caminamos en Unicidad, Mis Ropas son tuyas.

Cariño, tú eres una versión Mía con forma humana, lo que ocurre es que tiendes a distraerte de esta condición Divina.

Tu mente se va por la tangente, incluso se podría llamar que el mundo es conectivo, así es, porque te conduce inevitablemente a Mí.

Inclusive siempre te reúne Conmigo como si fuera la primera vez que lo hacemos.

Por esto busca elevarte para que detectes Nuestra Relación en la Unidad de la que nunca te fuiste.

Tú no eres esa imagen que siempre has tenido de ti mismo.

Si tienes una imagen donde mirarte es la Mía.

Tú fuiste hecho a ‘Mi Imagen y Semejanza’, por lo tanto, tú Ser está conformado por Mi Esencia Divina.

Tu deseo de Mí es Mi Deseo por ti, Somos una Unidad, Ambos nos arremolinamos en la Unicidad.

Juntos bailamos en la Unidad, aunados, inundamos de aventuras todo el Universo.

Corazón, tú y Yo Somos la aventura de la Unidad que se desarrolla con el Fuego del Amor.

Las imágenes que puedas ver, son producto de Nosotros Dos mientras estamos en Nuestra Casa en el Infinito.

Sí querido niño, estamos establecidos en el Infinito, no existe otro lugar donde permanezcamos.

Sé que te estás preguntando el porqué de tu desventura en el mundo físico y si es necesario que la experimentes.

Ahora te encuentras sobrevolando en la realidad de la Tierra, pero olvidaste que fuiste a experimentar la aventura de vivir en el mundo.

Estás en la Tierra no como un Heredero Mío, sino como un Guardián de la Tierra y esto significa que le estás prestando un servicio a Ella.

Amados Hijos, sé que esto en sí mismo les parece extraño por las volteretas que dan en la Tierra, incluso ahora que están volviendo a su Casa Estelar, por eso necesitan despertar a la Bella Durmiente en su interior.

Despierten Bellos Durmientes

Querido, si quieres subir alto, empieza a despertar tu Memoria Divina para que te percibas tal como eres.

Te estoy diciendo que no necesitas subir al Reino de los Cielos, porque ya estás ahí, junto a Mí.

Aunque estés encarnado en la Tierra, tú nunca te fuiste del Cielo, sólo estás en un sueño que te hace creer que te ausentaste de mi lado.

Estás atrapado en este sueño del que ahora estás despertando y ganando terreno a medida que tus ojos parpadean con cada apertura de la Mente Cósmica que experimentas.

Está muy cerca el día que podrás observarte tal como eres, aquí sentado, en el Cielo, junto a Mí.

Tú y tus hermanos son Ángeles en estado de vigilia en la Tierra. 

Todos son vigilados por otros Ángeles de Luz, que ahora están despertando a Mis Bellos Durmientes de su largo sueño.

Expande en tu mente la idea que eres una bendición que está sobre la Tierra con una forma humana.

Amado Niño, eres una bendición para ti, el Cielo y la Tierra.

Por más que calces los zapatos de esa realidad ilusoria, tú eres Mi aliento que camina en la Tierra.

Pronto vas a saber y ver quien eres, entonces suavizarás tu andar difícil en la Tierra.

Cuando veas que estás en Mis Brazos en el Cielo, nunca más volverás a pisar o serás arrastrado por los obstáculos de la Tierra.

Cuando salgas del no-tiempo y el no-lugar, te darás cuentas que el Cielo es un Estado de Conciencia Superior.

La Conciencia es solo Conciencia y tú te estás preparando para recuperarla y hacerla estallar en el Cielo y en todas partes.

Dentro de ti, en tu corazón, está contenido el Cielo.

Digamos con mayor precisión que el Cielo es el Aura que corona tu Ser.

El único inconveniente por el que no lo ves, es que no miraste lo suficiente en el espejo del Amor latente en tu Esencia, donde está reflejada tu Verdadera existencia del Ser.

Una y otra vez te declaro que eres Mío, sólo Mío y que nunca dejaste de serlo, ni saliste de Nuestra Casa, la Unidad.

Amados Hijos, en el Reino que se llama vida en la Tierra son Mis Bellos Durmientes que están a punto de Despertar, para aunar sus corazones y su Ser Superior en completa Unidad Conmigo.