Comenzar de nuevo

Heavenletter # 5323 Publicada el 21 de junio 2015

Dios dijo:

Querido, veo repulsa en ti, cada vez que el sufrimiento te obliga a comenzar de nuevo.

Por lo general, elevas tus puños hacia Mí, para reclamarme, a veces con palabras poco amables, que estás sufriendo de nuevo.

Cariño, no me duelen tus palabras, sino que tu disconformidad convierta a los sucesos de la vida en una causa extrema, que te haga cerrar el corazón y anclarte en las bajas vibraciones.

Escucho cuando me reclamas, ‘¡Dios, tú hiciste esto, me estás haciendo sufrir, ahora voy a buscar cómo resarcirme en el mundo!’.

Si me amas, considérate una Extensión Divina, así no te observes separado de Mí, ni pienses que tienes que defenderte de tu Dios.

Obsérvate como Mi Propio Reflejo, incluso cuando despotricas contra Mí, porque piensas que necesitas defenderte, poniéndote en mí contra.

Para resolver los conflictos de tu realidad, no necesitas oponerte a Mí, tampoco asumirte en situaciones generadas por el miedo, ya que así te auto-flagelas sin sentido, además cuando lo haces, hieres el corazón que compartes Conmigo.

Si te hace sentir mejor, cúlpame por tu sufrimiento, pero no te auto-lastimes, antes reflexiona que eres un Desprendimiento Mío, al que nunca podría dañar.

Cariño, sé que tú y todos Mis demás hijos sufren, sin embargo, siempre me hacen responsable de sus desgracias, porque se olvidan que toman sus decisiones a través del Libre Albedrío que les di a todos.

Sobre esto puedo decirte que, antes de optar por embestirme en el corazón que compartimos como Uno, pienses que el resultado de tus sufrimientos parten de las elecciones que hiciste.

Yo te elegí hace mucho tiempo y hasta este momento sigo haciéndolo, entonces deja de pensar que te mantengo aprisionado bajo el yugo de sufrimiento.

Por supuesto que has sufrido y sigues haciéndolo en tu realidad, sin embargo, por más que te desagrade, eres tú el que se pone bajo el yugo del dolor en el mundo.

Tu vida es para que te sirva de aprendizaje en el perfeccionamiento de la Maestría de tu Ser durante el Proceso de Cambio y Regreso a Mí.

Siempre busco sacarte el yugo del sufrimiento que te colocas en tu vida, e incluso te tiendo muchos puentes para que lo hagas, pero la mayoría de las veces, a través de tus opciones, agarras la rama de olivo equivocada.

No obstante sigo enviándote ayuda a través de distintas sincronicidades y medios, pero prefieres rodearte del calor de la consternación que se convierte en ira, te quema y agujerea el corazón.

Puedo decirte que siempre eliges ser una víctima de la vida, antes de comprobar Mi Presencia y Mi Amor en tu interior.

Voy a pedirte que, antes de sacar conclusiones apresuradas sobre tus circunstancias en la vida y elegir en consecuencia, optes por buscar Mi Amor, ya que así podrás transformar la angustia de la ilusión, en preservación de tu corazón y Alma.

Yo no hago excepciones, entonces cuando se trate de ti mismo tampoco las hagas, ahórrate la angustia, medita antes de ponerle una soga a tu corazón.

Amados Hijos, para que puedan comenzar de nuevo sin tantos calambres o dolores en el corazón, primero desapéguense de la desesperación y el enojo, que los impulsa a defenderse con un sentido de venganza.

Comenzar de nuevo

Querido, actualmente estás muy aferrado a la vindicación, siendo que tú eres un Ser soberano.

Cuando te asumes en esas posturas, terminas enredándote más en la Mátrix, con una mayor intolerancia y deseos de venganza contra lo que se cruce en tu Camino, incluido Yo.

Cariño, cuando optas por rebelarte y luchar contra Mí, no sólo dejas de escucharme, también te embarcas en un combate interior contra ti mismo.

Te alistas en una batalla de un solo sentido que te socava a ti mismo.

No necesitas disputar Conmigo, ya que tu ego te hace pensar y actuar en contra de tu propio Dios interior, por eso reflexionas inconscientemente de la siguiente manera:

‘Dios es muy malo y lo castigaré por el sufrimiento que me ha dado’.

‘No voy a someterte a Él, no le permitiré que sea Mi Amigo’.

‘Tampoco me sentaré junto a Él, ni le brindaré el beneficio de la duda’.

A continuación tu ego reafirma su lema, no el Mío: ‘Mía es la venganza’.

Desde la amargura te gusta verte a ti mismo fuerte e indomable.

La represalia contra ti mismo no te fortalece, profundiza más tu dolor, e incluso te esclaviza más, por agrandar la distancia con tu Dios interior.

Cariño cuando sufres, lo condimentas con bastante enojo en la parte superior, por lo tanto te auto-limitas a sólo dos alternativas: ‘luchar o desistir’.

No obstante, entre el calor y el frío, siempre encontrarás sub-matices.

Si eliges el juicio, entonces me verás cómo te he juzgado y castigado.

Esto quiere decir que te has unido al juicio y me estás transfiriendo tu percepción a Mí.

Aquí es donde tu mente da en el clavo, para hacer encajar todas piezas y concluir con irreductibilidad.

Tu mente influye en tu voluntad y no te permitirá dejar este debate, sin importar qué estés equivocado.

Pero te es posible cambiar de rumbo, derribando la fachada a la que te aferras.

Tienes la alternativa de salir de los pensamientos que Me hacen ver como un Dios de la condena y a ti como una víctima Mía.

Reflexiona sobre cuantas oportunidades te brindo, mientras estás cerrado en negármelas a Mí.

Piensa en los boletos del ego para que regreses a la negatividad y el cierre de tu corazón.

Medita sobre tu negación a ver las coyunturas que te devolverán la Felicidad.

Recapacita que la amargura no te conduce a la Felicidad y que no es necesario que le entregues un total dominio sobre ti.

Concéntrate en atraer más beneficios en todas tus manifestaciones, en cada uno de tus días y momentos.

Amados Niños, les repito una vez más, necesitan ‘dejar ir’ a las viejas creencias que los limitan con miedo, en sus oportunidades para comenzar de nuevo.