Heavenletter # 4993 Publicada el 27 de julio 2014
Dios dijo:
Algo que puedes estar
aprendiendo, es a dejar las cosas tal como están.
Esto es algo bueno para
aprender, ya que no siempre es cierto que donde hay humo, hay fuego.
Con frecuencia, te
entusiasmas de tal forma con la vida, que piensas que debes esforzarte para
mantener el control sobre todo.
Sin embargo, te
comportas como el pastor al que le aulló el lobo y comienzas a correr por el
temor a perder lo que conseguiste.
Sientes sólo a lo
perentorio, entonces cada día, a medida que atiendes lo urgente, desatiendes lo
que alcanzaste y lo vas dejando en el camino.
Amados, deberían
aprender que no necesitan correr, ni jadear, porque la vida puede cuidarse a sí
misma.
Elección consciente
También, podrías
aprender que consumes demasiada Energía en apagar incendios, de cuya combustión
sólo quedan cenizas.
Querido, es como si te
preocuparás por una erupción volcánica por la pretensión de apagarla.
En tu vida, las urgencias
son las erupciones que surgen por tu afán de hacerlas desaparecer lo antes posible invirtiendo poco o ningún esfuerzo.
Sin embargo, las urgencias
en la vida son relativas y, en la actualidad, equivalen a una uña rota.
No obstante, igual ves
una gran tragedia en ello y descuidas el hecho que mañana, se te podrían romper
varias uñas.
Hijo Mío, inclusive los
corazones rotos se reparan.
Te voy a dar un buen
consejo, “elige con consciencia las
batallas que lucharás”.
Cualquiera sea el caso, no
tienes que enojarte con la situación, para que no derroches Energía.
Busca encontrar algo
elevado dentro de cada evento, para poner atención en lo verdaderamente importante, así puedas fluir por encima de cualquier conflicto.
Amados, dejen de lado
las faltas, para trascender con un cambio inmediato por sobre las vicisitudes.
Gasto innecesario de Energía
Trata de sobreponerte
para que no te cuestiones inútilmente con pensamientos como:
¿Ahora, qué más me pasará?
¿Cuántas dificultades más tendré que sobrellevar antes que acabe el día?
Querido, con frecuencia
las dificultades desaparecen por sí solas, así como vinieron se van.
Tus pensamientos son
poderosos, tú los creas.
En el caso de las
urgencias, quizás te guste, por el sabor a la adrenalina en la reacción.
Tal vez, necesitas de
las emergencias para activar tu capacidad de reacción al peligro y responder de
inmediato a todos las urgencias prefabricadas por tu adicción mental.
Sin embargo, en el afán
de andar apagando incendios inexistentes, descuidas a lo que verdaderamente
debes cuidar.
Cuando gastas demasiada
energía en tensiones innecesarias, descuidas la salud de tu cuerpo, mente y
espíritu.
Ahora te pregunto y
respóndete sinceramente, cuando es así:
¿Duermes por las noches?
¿Concilias con facilidad el sueño?
¿Cómo te sientes al día siguiente?
¿Cansado, desganado, preocupado, tenso o relajado, tranquilo, alegre y fresco?
Amados, no pueden
intervenir en todo, tomen nota de lo que les acontece y déjenlo ir, no
incorporen en su Ser la inseguridad del momento, ni lo transmitan al entorno.
Inseguridad de los detalles
Querido, si te asumes en
la inseguridad, con seguridad verás a todos los detalles cómo potencialmente fatales, e incluso sumarás
muchos más.
Hay más en la vida por
fuera de tu fijación para mantener el control, tratando de arreglar todo.
En general, es necesario
que dejes las responsabilidades de los demás para ellos mismos.
Cuando eres quien
conduce en el trayecto, para poder recorrer la senda de regreso, no necesitas indicarle a nadie el camino, ni tampoco
que lo hagan contigo.
Cuando temporalmente
compartes el tránsito en compañía de otros y el conductor no eres tú, tampoco
requieres indicar como se debe llegar a destino, a menos que te lo pidan
específicamente.
Entonces no te esfuerces
vanamente con preocupaciones inútiles, ni compartas tus inquietudes con los
demás.
Ciertos asuntos se
cuidan por sí mismos, igual que los demás respecto de los suyos.
¿Por
qué sigues las directrices generales del mundo, autoasumiendo como propias, las urgencias comunes a todos?
¿Por
qué debes reaccionar como esperan lo demás?
¿Qué
pasaría si reaccionas de forma distinta, desde tus propios puntos de vistas?
Hijo Mío, lo único que
te pido es que no establezcas para ti mismo, las fijaciones predeterminadas por otros.
Amados, estos sentidos
de urgencias no es una característica deseable para el desarrollo y extensión
del Ser Individual.
Fijación con el control
Querido, no existen las urgencias
positivas.
Hay urgencias con un
sentido de Alegría deliciosa, como las de un niño que espera la víspera de
Navidad, su cumpleaños o una excursión a la playa.
Si te surge un fuego
verdadero, repórtalo a tu Yo Superior y Guías Espirituales, para te ayuden con
la urgencia y puedas apagarlo.
Sin embargo, no todas
las hogueras incluyen necesariamente una emergencia.
Un retraso no es una
emergencia y los errores que puedas cometer, deben preocuparte tanto o menos que
un delito menor.
Si no obstante, te
mantienes en la fijación con el control porque buscas perfección, exígetela a ti
mismo y otórgales respiro a los demás.
Aunque, no te vendría
mal, un poco de holgura para ti también.
¿Por qué te molestas a ti mismo con más de lo pretendido en el panorama general?
¿Es lo tuyo estar siempre enojado?
¿Por qué no te permites Ser realmente sin tantas cosas "importantes"?
Amados, aprendan a conocer
la diferencia entre una montaña y la colina de un topo, así dominen la fijación
con el control de todos los eventos en sus vidas.
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