Cada ser humano es un hijo de Dios

Heavenletter # 4822 Publicada el: 06 de febrero 2014

Dios dijo:

¡Qué hermoso es un día contigo en la Tierra!

¿No te he dicho esto antes?

Tal vez esta sea una idea nueva para ti.

Puede que incluso hayas pensado que tú eras una mancha sobre la Tierra.

Debo decirte que tú eres perfecto en la Tierra.

Tú eres exactamente eso, perfección en el aquí y ahora, tal y como eres, sin importar lo que proyectes sobre tu imagen del Ser.

Si tú piensas lo contrario, es porque las capas del disfraz, te han enmascarado a ti mismo y a los demás.

Espíritu de la vida

La vida en la Tierra se ha asemejado un poco a Halloween, donde la gente para entrar en el espíritu de la misma, se disfraza.

Tú, puedes haber llegado a creer que los ropajes que usas son los verdaderos.

Los disfraces son disimulos y esos no son tus trajes.

Tú eres un ser humano vivo y real, hecho a mi imagen.

En ese traje, tu imagen también puede estar distorsionada, donde la verdad sobre ti, se ve alterada.

Si quieres ver más allá de la superficie, solo debes mirar el brillo de tu propia luz. 

La belleza de todos Uds. no se esconde de Mí.

Yo y todos los Grandes Seres Espirituales, también la podemos ver y lo que todos vemos, también Uds. lo pueden ver.

Más allá de lo que los ojos ven

Todo lo que tienes que hacer es ver más profundo.

Mírate a ti mismo más allá de la visión de tus ojos, para que los demás también puedan hacerlo.

Mira más allá de la educación, las categorías, los registros policiales, las boletas de calificaciones y la conducta.

Todos son hijos de Dios:

• Un bebé que llora lo es;
• Lo mismo aquellos que se ven como pobres actores en la vida.

Todo el mundo en la Tierra son mis hijos, a pesar de lo que puedan decir.

¿No les he dicho que no existe nadie 

que sea más o menos que otros?

Amados, buscan la evidencia en la superficie, porque a cada ser humano le late un corazón repleto de deseos.

Debajo de lo que pueda parecerles torcido, se encuentra la pureza de un niño con un yacimiento enorme.

¡Los juicios no hacen ningún bien!

Conozcan la Verdad, vean la Verdad, porque la Verdad está viva.

Te estoy hablando a ti, no a otra persona.

Conócela, mírala y vive la Verdad, para que el juicio no tenga ninguna razón de golpearte con su martillo.

Amados, Yo no hablo que cometan la estupidez de ir a la guarida del león, sin embargo Yo te pregunto a ti:

• ¿El león más salvaje no es también hermoso?
• ¿No tiene su lugar bajo el sol?
• ¿No puedes reconocer, pensar o considerar a esta misma belleza en cada ser humano?
• ¿Inclusive en aquellos que han realizado lo que el mundo llama, graves males?

¿Qué pasaría si…?

Tú no impides la entrada de aire fresco y el sol, pero frunces el ceño.

Te pregunto qué ocurriría si nadie:

• ¿Frunciera el ceño para que el mundo volara más alto?
•  ¿Qué pasaría si la condena no existiera?
• ¿Qué harías contigo mismo, si dejaras de compararte hacia arriba o hacia abajo?
• ¿Qué pasaría si tú dedicaras a amarte y amar?

El amor a la distancia también es bueno:

• ¿Y si el amor se convirtiera en un escudo de armas para todos?
• ¿Qué pasaría si el amor anunciara su llegada y su salida?
• ¿Hijos de la Tierra, que pasaría si el amor estuviera siempre presente en sus corazones y mentes?
• ¿Qué pasaría si la denigración dejara de existir?
• ¿Qué pasaría si sus pensamientos inspiraran a los demás y a las personas torpes que se encuentren frente a Uds.?

Yo les digo que pueden convertir en Amor a cada aspecto de su Ser.

Sanación instantánea

Te he dicho que puedes curarte a ti mismo en un instante:

• También puedes curarte a ti mismo del esnobismo.
• Puedes sanarte a ti mismo del juicio y la negatividad.

No pienses que el juicio y la negatividad tienen que existir para posibilitar tu sobrevivencia o para que puedas estar en tu Verdad.

• La Verdad, tu Verdad y Mi Verdad son la Realidad.

• Lo veas o no, la realidad es una y es válida para todo el mundo.

Esto no quiere decir que si tú o alguien no la siente en sí mismo, sirva de excusas para que se comporten mal y cometan crímenes.

Y tal es esta realidad, que tampoco debe servirte de pretexto para que juzgues, ni perdones, porque, tampoco, no hay nada que perdonar.

Por supuesto, que tú no debes aferrarte a lo que no es para ti, ya que puedes beneficiar a otro:

Si quitas la culpa,

Tendría cabida el perdón?