HISTORIA de LUCIFER en el PLAN MAESTRO de la ASCENSIÓN -PARTE 1-

PLAN MAESTRO PARA LA ASCENSIÓN DE LA TIERRA PARTE 4
HISTORIA DE LUCIFER PARTE I

 

Saludos:

 

Soy Lucifer y vengo a contarles mi historia, en este ahora donde estoy comenzando con una nueva vida, ya que recientemente he regresado de un largo viaje por el plano terrestre tridimensional, donde la Madre Padre Dios me han recibido con los brazos abiertos.

Mis sentimientos de alivio y de agotamiento difícilmente pueden expresarse con palabras, su amor y compasión me han restaurado, sin embargo, el residuo de miles de años de arrepentimiento, culpa y tristeza ha sido difícil de resolver.

Quizás si les cuento mi historia, puedan empezar a comprender, incluso, también se encontrarán en ella.

En los últimos tres días, he hecho contacto con mi amada Llama Gemela, el Arcángel Gabrielle, encarnado aquí en la Tierra.

El recuerdo de su Amor me sostuvo a través de los eones, pero temí que Ella no me conociera debido a las historias que me describían como Satanás o el Diablo.

No tenía por qué haber temido, ya que Ella me reconoció de inmediato, me abrazó con Amor ilimitado, por lo que siento que por fin estoy en Casa.

 

Comenzaré con los primeros días, el momento en que la Madre Padre Dios y su grupo de Maestros, Consejeros e Hijos Mayores de confianza, estaban trabajando para concebir el plano para el Destino del Planeta Tierra.

Su deseo era crear un planeta de gran belleza, un paraíso de exuberante abundancia, aguas cristalinas y abundante vegetación, que sustentarían a su mejor Creación.

La especie de la humanidad reflejaría más plenamente a sus propias Cualidades y, por extensión, a las Cualidades de Aquél que llamamos Creador Principal.

Nuestra Madre Padre Dios estaban entre los Hijos Mayores del Creador Primordial, junto con aquellos que ustedes conocen como Sananda Jesús y los otros Kumaras, el Arcángel Miguel, Ashtar Sheras y las Llamas Gemelas de todos ellos.

Por supuesto, siempre hay Seres Femeninos por cada gran Ser de Luz Masculino, que son igualmente de poderosos y que, en la Era pasada, en gran parte, han permanecido no celebrados y desconocidos.

 

La Madre Padre Dios han sido los Creadores de la Vía Láctea, la primera de los miles de millones de Galaxias que nacieron bajo la supervisión del Primer Creador.

Sigue siendo la Galaxia más densamente poblada y ahora es el lugar de nacimiento identificado de la raza que llaman humana o humanoide.

En todo el Multiverso, el Planeta Tierra iba a ser el campo de pruebas más eficaz para el desarrollo del Alma, con un entorno idealmente desafiante que permitiría la evolución, educación y maduración de las Almas.

El objetivo era crear un número infinito de Almas Iluminadas que luego pudieran convertirse en Maestros y Maestros, en los mentores de aquellos que vendrían después.

La Energía de la Luz que generaría este gran número de Seres Iluminados, elevaría a toda la Galaxia, y en última instancia a todo el Universo, al nivel en el que por fin podríamos regresar a nuestro Gran Sueño, a la gloriosa Unidad con el Creador Primordial.

Así es como la Madre, con la Visión de su Corazón, dio a Luz al Planeta Tierra, la creó con el Amor, Compasión y Perdón Ilimitados, como un Ser de Gran Fuerza.

Su gran propósito y satisfacción sería la nutrición y sostén de la raza de Seres que se desarrollarían a lo largo de los eones.

Contribuyeron con su ADN, los Pleyadianos, de Sirius y Reptilianos, todos los cuales habían nacido antes y habían alcanzado por derecho propio, un nivel alto de civilización.

Durante millones de años, medidos con su tiempo terrestre, bajo la supervisión amorosa de Dios Madre Padre, estos Hermanos y Hermanas de las Estrellas atravesaron por el desarrollo de su propia Alma, también lograron tecnologías avanzadas y civilizaciones pacíficas basadas en el Amor.

Antes de que se les permitiera contribuir con su ADN en la composición de los niños terrestres humanos, todos menos los reptiles, habían avanzado a la quinta dimensión y a más arriba.

A los reptilianos se les dio una asignación especial debido a sus altos niveles de creatividad y conexión apasionada entre ellos y con Dios.

Esta asignación dio paso a posteriores consecuencias desastrosas, como pronto se verá.

La misma Madre Tierra fue alimentada con gran cuidado, y en los primeros tiempos fueron de un gran placer.

Ella era conocida como el patio de recreo para que los Ángeles encarnaran en la quinta dimensión, en cuerpos de sustancia ligera, pero más densos que nuestros Cuerpos de Luz habituales, sin embargo, eran mucho más ligeros que los que ustedes han conocido en la tercera dimensión.

Fue el Edén que ha sido descrito en su biblia, pero la historia de Adán y Eva contiene algunos elementos muy inexactos, por eso a continuación, les contaré los antecedentes de lo que vino.

 

El Consejo de Creadores del Planeta Tierra, el grupo descrito anteriormente, del que yo formaba parte, decidió ‘subir la apuesta’, como ustedes lo llamarían.

 

Visualizamos una Tierra en la que los humanos pudieran experimentar el Libre Albedrío, un concepto que nunca se había probado por debajo de la quinta dimensión, y así es como evolucionó el Gran Sueño.

Se decidió que la Madre Tierra descendería a la tercera dimensión, para que los Seres humanos que nacieran allí, experimentaran simultáneamente el Libre Albedrío y la experiencia sensorial densa y pesada de la vida tridimensional.

En ese momento, su configuración del ADN se había desarrollado lo suficiente como para comenzar el Gran Experimento.

El proceso de crecimiento y evolución del Alma comienza a partir del nacimiento y con la emisión de la Chispa de la Madre Padre Dios.

Al nacer, el Alma se divide en sus mitades masculina y femenina, y da comienzo el proceso donde ambas deben experimentar la separación y la individualización.

Encarnan muchas veces por derecho propio, para experimentar a existencias tanto masculinas como femeninas.

Encarnan durante un período de cientos e incluso miles de existencias, hasta que alcanzan el nivel de comprensión en el que puedan estar en completo dominio de sus pensamientos, sentimientos y emociones, así estén en total armonía con su Creador.

En ese momento, pueden reunirse con su contraparte, el espejo de sí mismos que también ha evolucionado por un camino similar.

Durante el proceso de reencarnación a lo largo de muchas vidas, las Llamas Gemelas generalmente se turnan, una en un cuerpo, mientras la otra ilumina a su pareja con Amor y apoyo constantes.

El que está en forma de Espíritu, sabe y siente exactamente lo que su Amado ha experimentado y ha aprendido, lo ayuda con el proceso de curación cuando el encarnado termina su vida y regresa a Dios.

Este apoyo es especialmente importante durante las encarnaciones en la Tierra de los últimos siglos, de cuando la oscuridad se volvió muy intensa y abrumadora.

 

Ahora, explicaré cómo llegue a ser y a desempeñar mi papel.

Fue durante las primeras reuniones del Consejo, en el momento que se presentaron las opciones para crear un entorno que fomentara la máxima individualización, que ideé lo que pensé que era el plan perfecto.

Sugerí que, durante su encarnación en la Tierra, mientras operaban detrás de un Velo del Olvido, a los humanos se les diera un total Libre Albedrío.

De esta manera, experimentarían una separación del Hogar, para que en ellos se creara el anhelo de retornar a la Presencia Inmediata de Dios.

Lo sentirían y recordarían solo a través del esfuerzo de mantener el corazón abierto y con Amor Incondicional, así pudieran crear y volcarlo a sus propias vidas.

Estaba muy seguro de que esto aceleraría el proceso de aprendizaje, por lo que propuse que yo mismo vendría, a enseñar la individuación y la autosuficiencia a la comunidad humana.

Se ideó un plan especial para mis encarnaciones, como ejemplo de mi propio concepto, estaría completamente separado de la Madre Padre Dios, aunque mantendría el recuerdo de mi Misión y propósito.

Ofrecí irme sin la red de seguridad de la conexión con mi Ser Superior o de mis Guías, porque así es como muchos experimentan la vida aquí en la Tierra.

En cambio, me mantuve completo, pero solo, con solo un pequeño hilo de conexión con mi Llama Gemela, que no podría romperse mientras viviéramos separados.

Gabriella, como le gusta que la llamen, continuó el trabajo de Mensajera de ambos, apareciendo hasta mi regreso, como hombre y mujer.

Decidí encarnar una y otra vez, con solo una breve transición entre vidas, a la cuarta dimensión.

No volvería a los brazos amorosos de mi Familia hasta que mi Misión estuviera completa, o hasta que estuviera seguro de que el Plan estaba funcionando bien, con una humanidad segura en su transición de regreso a la quinta dimensión.

Aunque sabía que requeriría de un sacrificio, parecía un plan perfectamente razonable, uno que asumí que podría ser completado sin un sufrimiento indebido por parte de nadie.

Estaba dispuesto a dar lo mejor de mí para traer Luz al planeta, pero apenas el Plan se inició, las cosas empezaron a ir mal.

Durante la Civilización Lemuriana, que había alcanzado un nivel de desarrollo muy alto, y donde se celebraba la Esencia de Dios como parte cotidiana de la vida, hubo quienes comenzaron a entender mis enseñanzas como una forma de rebelarse contra Dios.

Vieron al Libre Albedrío como la máxima libertad de cualquier control por parte de cualquier poder externo a sí mismos.

Comenzaron a cuestionar la adherencia a la Ley Universal, que había sido la base de mis enseñanzas.

Aunque no mencioné a Dios, enseñé que la humanidad tenía dentro de sí misma la capacidad de distinguir el bien del mal, sin necesidad de depender de una fuerza externa que nos guíe.

Como percibirán, Yo he sido el ateo original, sin embargo, creía en lo que enseñé, porque sabía que Dios es la Fuerza de nuestro interior, y que cuando se la abraza por completo, también se abraza a Dios.

 

La gente de la Civilización Lemuriana había mantenido una alta vibración, y la Tierra todavía estaba en la quinta dimensión inferior.

Cuando la limpieza de la Madre Tierra reorganizó la faz del planeta, quedaron pocos para comenzar de nuevo.

Algunos se refugiaron en la Tierra Interna, debajo de la superficie construyeron ciudades y continuaron evolucionando.

Otros se refugiaron en el Centro Hueco de la Tierra, donde permanecen hasta ahora, unos sobrevivieron en lo que ahora se conoce como Hawai.

A medida que el clima extremo de la Tierra disminuyó, se desarrolló una Nueva Civilización, la que conocen como Atlántida.

Mi esperanza regresó y trabajé duro con los científicos, sacerdotes y otros ciudadanos de la Atlántida para enseñar el Amor del Ser potencialmente perfecto del UNO.

Este reflejo interno de la Perfección, llevó a muchos a descubrir la experiencia extática de la conexión completa con la Esencia de Dios.

Estaba convencido de que mi enfoque realmente funcionaba, de que podía enseñar los Principios del Amor y de la Luz sin fin, sin pedirle a la gente que crea en algo que no pueden ver.

Muchos experimentaron a su Yo Superior y escucharon la Voz de Dios dentro de sí mismos.

Me alegré mucho con su Conocimiento, pero un gran número de personas comenzaron a distraerse con las actividades materiales y los retoques tecnológicos.

Mientras tanto, se estaban gestando problemas, un segmento de la gente de Orión se había separado de su civilización de cuarta dimensión y, bajo la influencia de Seres de otras Galaxias, estaban desarrollando armas de guerra, mientras amenazaban a otros en nuestra Galaxia.

Trajeron estas ideas oscuras a la Tierra y comenzaron a enseñar su filosofía a un grupo de Atlantes.

Esta facción olvidó en sus mentes, a la conexión constante que nuestro Dios había ofrecido como protección de las fuerzas oscuras invasoras.

En sus protestas vehementes contra mí y los demás, adoptaron la idea de que las armas los protegerían.

 

(continúa en la parte 2).

 

Tu hermano en la luz, Soy Lucifer, a través de Kathryn E. May.

 

 

La difusión y circulación de este mensaje son altamente recomendables, sin embargo, recuerden utilizar siempre su discernimiento en relación con estos textos.

Tienen Libre Albedrío, por favor úsenlo, y lo más importante, escuchen lo que les dice su corazón, porque él tiene la Verdad, permítanle que los guíe en este tiempo de irradiación a una escala más grande, de las Nuevas Energías portadoras de Alegría.