Heavenletter # 5443 Publicada el 19 de octubre 2015
Dios
dijo:
Querido,
aunque el mundo haya favorecido al intelecto busca permanecer a favor de la
guía del corazón, ya que este Centro es el único que se aventura y sabe sobre
lo que les es Desconocido para la mente e ésta incluso teme.
El
intelecto tiende a medir y ver las cosas desde la lógica, mientras que el
corazón profundiza en la Verdad que la mente teme y desconoce.
Yo
no desfavorezco a la mente, sólo que la lógica, en general, tiende a ver a la
inteligencia como más importante que el corazón.
En ocasiones veo a la mente como un sable o cimitarra que corta al través a la vida o en zigzag.
En otras veo a la mente como un cuchillo que rasura al corazón, hasta afinar sus capas, para que permanezca debilitado.
Tal parece que a la
mente le gusta pensar que el corazón
es un rufián salvaje y tosco, o más bien, un adolescente rebelde, que se
alimenta de emociones.
La mente moderna ha
jugado demasiado y, a menudo, con el corazón,
como si este Centro no conociera nada, en absoluto.
Ten en cuenta que me
refiero a la mente que constituye a todos tus pensamientos, emociones y
creencias limitantes.
La cuestión es que la
mente sólo reconoce a su propio razonamiento, a veces es prudente y se pone
límites respecto al pasado que ya conoce.
Por lo general, la mente
ve al corazón como un timón que
mantiene vivo al cuerpo.
Cuando se trata de algo desconocido el temor hace rehuir a la
mente, mientras que el corazón se
queda firme para hacerle frente, sin miedo.
Podría decirse que:
La mente utiliza números y especulaciones, mientras que el corazón utiliza sentimientos.
La mente explica, mientras el corazón escucha.
La mente está llena de un sinnúmero de pensamientos, mientras el corazón profundiza por debajo de la superficie, e incluso se sorprende a sí mismo.
Hazle espacio al corazón para que lo percibas por fuera
de la reputación irreflexiva que se le ha asignado, como si se tratará de un
músculo sin la capacidad de acceder y brindar conocimiento, siendo que es un
Centro Primordial donde habito Yo y tu Alma.
Amados
Hijos, saluden a sus corazones que son los
reales aventureros en sus existencias, mientras están en un cuerpo en la Tierra,
constituyen al Centro que les permite profundizar en lo desconocido para la
mente.
El corazón sabe de lo desconocido
Querido,
la mente siempre refuta, dice con facilidad no, se apoya en los aplausos del
mundo con demasiada frecuencia y tiende a poner al corazón en una posición que
le impida manifestar la Verdad del Ser.
Con probabilidad lo que se
llaman errores, tanto para la mente, como para el corazón, tengan significados parecidos.
La diferencia está que
el corazón los observa con humildad y
Amor, mientras que la mente se dedica a analizarlos, desglosarlos y clasificarlos.
A la mente le gusta
planificar, mientras que al corazón le gusta ir por el Camino elegido sin anticiparse adónde lo conducirá, simplemente
confiando en la Fuerza de la Energía y la
Luz de Mi Amor.
La mente tiende a
cerrarse porque está cercada por límites definidos que la acotan a través de
las mediciones que realiza, así pueda trabajar de acuerdo a los lineamientos
externos, para asegurarse un éxito rápido y sin contratiempos.
Sin embargo, el
propósito queda revestido de una intensión apoyada en la necesidad de ganar y
así se crean fronteras alrededor de la manifestación.
Esto hace que la mente se
estructure y acorrale a sí misma, ya que obedece a una programación externa que
la mantiene dentro de parámetros preestablecidos y elaborados por una Conciencia estandarizada.
Esta es la manera que la
realidad del mundo se asegura que todos respondan a la Mátrix, ya que la mente
se encarga de señalarles que tomen un atajo, para que se salgan del Camino principal que el corazón se empeña
en mantenerlos.
La mente se encarga, a
través del miedo, de indicarles cuales desvíos son los supuestamente más
seguros, mientras que el corazón los
impulsa a aventurarse por el Camino sin
temor, para que a través de si mismos, aprendan a enfrentar a los obstáculos, así
puedan rodearlos.
Por supuesto, que la
mente no solo piensa, algunas logran desprenderse de la ilusión, comienzan a explorar,
lo que les permite despegar y aventurarse a recorrer diversos territorios sin
mapas, logrando triunfar.
Cariño, no malinterpretes Mis Palabras, ya que ni la mente, ni el corazón tienen que ser de una manera u otra.
Una mente inteligente
puede romper fronteras y sin importar lo que el mundo pueda asegurar al
respecto, a veces no es siempre un 100% correcta.
El corazón no se maneja con consideraciones duales de bien o mal,
correcto e incorrecto, sencillamente se aventura confiando en sí mismo, se
apoya en su propia Verdad, porque la
única manera de saber, es averiguando si se trata de Amor real a través de las frecuencias, sin cálculos previos.
La mente y el corazón tiene valor, pero no siempre
pueden ir tomados de la mano, sin que esto quiera decir que estarán
enfrentados.
Amados
Hijos, tengan libertad de mente y corazón, aúnenlos con la misma Energía de Amor, de manera que puedan aventurarse a los supuestamente desconocido,
sin temor, ni ninguna baja vibración.
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