jueves, 9 de octubre de 2014

Pensar antes de hablar

Mensaje Maya de Ahau – Theresa Crabtree



Queremos recordarles lo que ya expresamos en mensajes anteriores, sobre la importancia de “Pensar antes de hablar”.
Bienvenidos al presente mensaje.

Queremos recordarles lo que ya expresamos en mensajes anteriores, sobre la importancia de “Pensar antes de hablar”.

Como dijimos anteriormente, los pensamientos negativos se agrupan a sí mismos, causando estragos en su Reino, expandiéndose por el Universo.

En este momento nos gustaría que se concentraran en aquello que les permitirá obtener control de las palabras que pronuncian.




Reflexiones internas



Queridos hermanos, no necesitan de la instrumentación de muchas herramientas antes de abrir la boca para hablar.

En otras palabras, necesitan “pensar antes de hablar”!

Antes de emitir una palabra, reflexionen sobre lo siguiente:

Si es el momento adecuado; 

Si contiene honestidad; 

Si se trata de una cuestión del ego; 

Si es realmente necesario; 

Si refleja amabilidad.

Las reflexiones que acabamos de sugerirles son filtros para que los practiquen antes de hablar.

Si las ponen en práctica, con el tiempo percibirán que:

Dominan la habilidad de controlar lo que dicen, incluso hablarán mucho menos. 

Los demás los escucharán con más atención, porque sus palabras serán justas y merecedoras de ser escuchadas. 

Ejercitarán, sin presiones del pensamiento, la pronunciación de sus palabras. 

Dejarán de emitir juicios hacia los demás y los eventos que los rodeen.


Pueden usar la frase del presente mensaje “Pensar antes de hablar”, como un aviso e invitación a prestar más atención a los dichos que pronuncian.

Coloquen este recordatorio en lugares de fácil acceso, para acceder a una mayor claridad antes de pronunciarse ante los demás.





Pensar antes de hablar



A medida que Uds. adquieran dominio sobre sus palabras, se asombrarán al descubrir la claridad con la que se comunican, a través del lenguaje corporal y telepáticamente.

Actualmente, ponen mucho énfasis en las palabras, lo que se traduce en malentendidos, especialmente por:

La pronunciación de juicios, críticas y sentencias; 

La poca atención que prestan al lenguaje corporal y las palabras no dichas. 

Los gestos del interlocutor son importantes, contienen mensajes que indican sus estados de ánimo.

Está en aumento la comunicación mediante dispositivos electrónicos, lo cual está atentando con la costumbre de escuchar y mirar durante el intercambio con los demás.

Los animamos a ejercitarse con:

El control de sus lenguas, porque al hacerlo aligerarán la carga que colocan en la Tierra y más allá. 

La práctica de pronunciarse desde un mayor sentido de la oportunidad. 

Con el aumento de la honestidad consigo mismos y los demás. 

Con el aprendizaje de los beneficios del don de utilizar el “Nosotros” en lugar del “Yo, Yo, Yo”. 

Con hablar sólo de aquellas cosas necesarias, para practicar la amabilidad.

Estas cinco premisas  los ayudarán a “pensar antes de hablar” y les abrirá la puerta a una vida más agradable y satisfactoria.


Selamet! Ahau 


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