Heavenletter # 5425 Publicada el 01 de octubre 2015
Dios dijo:
Querido,
cuando permaneces Conmigo no necesitamos hablar ni pensar, estamos más allá del
pensamiento, nos mantenemos rodeados en el interior de la Luz del Océano de la
Unidad.
¿Qué más quieres para venir hasta Mí?
Para venir a Mí no tienes que hacer nada, salvo considerarte bienvenido a Mi Conciencia.
Este es un acto que no
requiere de ninguna acción, sucede por sí mismo y no dudes que lo recibirás sin
que te des cuenta.
Entrar en el Reino de los Cielos no es algo que deba
hacerse, no lo hagas, nadie puede hacerlo, simplemente Es sin ceremonias.
Tú ya has recibido una
invitación estelar, además, nunca existió ningún momento donde no la
recibieras, sólo que puedes haberla pasado por alto, por no darte cuenta o
sencillamente no poder verla.
Tal vez cuando la
recibiste pensaste que necesitabas ajustarte a varios requisitos antes de
considerarte digno de aceptarla.
Tu invitación puede haberte
llegado con un suave toque en tu corazón:
Tal vez estabas ocupado en tus quehaceres habituales y recibiste una señal en tu corazón y no la identificaste.
Quizás pensaste que se trataba de un malestar físico.
Puede que te hayas quedado pensando en su significado, sin que llegaras a identificarme.
O si lo percibiste como un toque Mío, te asustaste y creíste que no estabas listo para abrirme la puerta.
Cariño, no importa el motivo por el que no hayas interpretado Mi Invitación, considera que sigue en pie y que desde el comienzo de los tiempos siempre fuiste un miembro amado de la Unidad.
Abre la puerta de tu corazón que Yo estoy aquí y estoy esperándote.
No esperes que te convoque, anticípate a Mi Toque, abre el Portal de tu corazón, y activa el Diamante Sagrado.
Algún día, sin que lo
esperes, se abrirá la puerta que nos conecta y te encontrarás espontáneamente
frente a Mí en tu Conciencia del Ser.
Te equivaldrá a ser
testigo de ti mismo, te sorprenderás al percibir a la preciosa Luz interior de tu propio Ser.
Sin siquiera un esfuerzo
de tu parte, transmutarás en toda la Luz
que está encerrada en el cuerpo que usas ahora.
Amados
Hijos, cuando descubran su propio Océano de Luz exclamarán admirados ¡Wow, Yo
Soy la Luz de Dios!, ¡Yo Soy Dios!, ¡Siempre fui Dios!, ¡Bienaventurado seas
Amados Dios!
La Luz del Océano interior
Querido,
cuando abras la puerta al Océano de la Luz interior te fusionarás Conmigo.
Tú eres Mi Luz, sólo que lo olvidaste y no puedes recordarlo porque basas tu vida en ilusiones por fuera de la Alquimia Natural del Ser.
Tú crees que eres parte
de la realidad del mundo, pero estás en el Océano
de la Luz de la Unidad.
La Luz es la esencia del Océano en el que permaneces, tú eres la Luz.
Cariño, saluda a tu Luz, dale la bienvenida a tu Esencia Divina, o mejor dicho, acógete a ti mismo dentro de la verdadera Naturaleza de tu Ser, la Luz de Dios.
Tú eres la Luz y es lo
único que siempre has sido.
Tú eres parte del Todo y esto quiere decir que eres un Ser de Luz Eterno e Infinito.
Aunque sea por un
momento, permítete Ser, posibilítate
percibir a tu verdadera Realidad Divina,
para que veas que eres Dios.
¡Corazón, tú eres la Luz de Dios!
Tú
no sólo eres Luz en el Océano de la Unidad, eres Mi Luz, eres la Luz YO SOY,
Somos Luz.
Ambos
Somos la Magnificencia de la Luz, Mi Magnificencia es tuya, en esto no hay
comparaciones, salvo en los escenarios inventados por la ilusión del mundo.
Tú
y Yo Somos Luz, llegó el momento que escuches Mi Llamado de Regreso y que
comiences a participar de lo que te traerá de vuelta al Hogar.
Sí,
llegó el momento que aumentes el nivel de tu Conciencia, para que este Estado del
Ser elevado, te haga ver que eres el Amor de la Fuente.
El
Amor que te hablo es sin preguntas, simplemente Es, es el Amor YO SOY.
Tú
eres Amor y nada más, no eres lo que el mundo dice o te sugiere.
Todas
las dificultades en las que estás embarcado son parte el sueño del no Amor del
mundo, no existen, entonces saca tu Ser de ese sinsentido.
Tú eres un Ser atemporal
que posee Mi Sabiduría, por tanto, sal de la ignorancia que te mantiene sumido en la realidad del mundo.
Tú dispones de múltiples
opciones para achicar el margen interior de la ignorancia de la ilusión.
Tú
eres un Maestro y la inocencia es uno de tus componentes, es la puerta de
entrada que anticipa tu Regreso al Hogar.
Abre
la mirilla mental que opaca tu inocencia con falsas creencias y que la disfraza
de matices supuestamente éticos, siendo que simplemente, es una pantalla para
ocultar a tu verdadera Esencia.
Amados
Hijos, permítanse ver su inocencia para que abran la puerta que les dará acceso
al Océano de la Luz interior, háganlo desde ahora, para que les dé la bienvenida
al lugar de donde nunca salieron.
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