Heavenletter # 5439 Publicada el 15 de octubre 2015
Dios dijo:
Querido,
tu corazón me pertenece y su contenido también, me refiero al Amor que no
conoce límites.
Por supuesto que todos y
todo está contenido en Mi Corazón,
nada ni nadie queda excluido de dónde Yo estoy, sin olvidar que me encuentro en
todos lados, Mi Energía abarca por
completo a la Creación.
Esto significa que ni un
mínimo fragmento del Amor que posees
en tu Ser puede ser dejado fuera de tu corazón.
Tal vez hayas aprendido a escatimar el Amor.
Quizás has aprendido a economizar el Amor.
Puede ser que no quieres ser generoso con el Amor y lo desperdicies sin darte cuenta.
Lamentablemente tu falta de prodigalidad con el Amor hace
que te impidas a ti mismo obtener más.
Además, te mantiene con una
visión mental oscurecida que no te posibilita entregar más de esta Energía porque la percibes con un
sentido de escasez, por tanto, el temor te hace creer que debes esperar a otra
ocasión, ya que en este presente no te sobra.
Incluso, el sentido de
insuficiencia puede estar aunado con el de desmerecimiento y hacerte pensar que
debes ganarte el Amor, como si se tratará de una competencia, un proyecto o de
la necesidad de tomar medidas extremas que garanticen la seguridad de
alcanzarlo y luego conservarlo.
En el mundo es común
pensar en términos de seguridad para todas las circunstancias, incluidas
emociones y sentimientos.
Pero el Amor necesita florecer en el interior de
cada uno, para recién poder regalarlo.
Este no implica que
deberás entregarlo y sentarte a esperar los resultados, ya que aquí no
termina el asunto.
Cariño, el Amor es ilimitado, no puede contenerse, limitarse, sofocarse, retenerse, ya que no es una Energía perecedera, es Eterna e Infinita como tu Ser y el Mío.
Debido a esto carece de
sentido que retengas al Amor, su entrega es el verdadero sentido de tu existencia
del Ser y el momento es el Ahora, no mañana.
Para entregarlo no hace
falta que estés cerca, puedes hacerlo a la distancia, esta Energía viaja
alrededor de la Tierra y más allá, incluso, de acuerdo a las intenciones
presentes en su emisión, puede regresar potenciada de múltiples maneras.
Entonces decídete a
enviar Amor a todos en la Tierra y
más allá, para que te alejes de la idea de separación o resarcimiento, porque
esta Energía no puede etiquetarse, ni
marcarse con un precio que le asigne un valor dual o ilusorio.
Amados
Hijos, el Amor no está contemplado por una ciencia como la matemática, porque
se trata de Mi Energía, por tanto es libre, ilimitada, Infinita y Eterna,
además es el componente principal de todo lo que integra Mi Creación.
El Amor no conoce límites
Querido,
el retorno del Amor no está regulado por ningún reglamento, podría decirse que
está resguardado por una Ley Divina que no alcanza a ser una normativa, pero
que siempre se cumple.
Te digo esto porque como
emisor de esta Energía, de acuerdo a
lo que envíes, será la proporción que recibas y si la causa es acumular Amor, el efecto en la recepción, consistirá que los demás desistan de corresponderte, ya que no puede ser
demarcado.
El Amor es una Energía Libre que debe ser dada sin límites, ni sujeciones, de lo contrario deja de serlo.
El Amor no es moneda de cambio, que incluye intereses fiduciarios o de usura, para asegurar su devolución en tiempo y forma.
En este momento, estás
aprendiendo sobre el verdadero valor del Amor
en la vida.
Estás aprendiendo que es
libre, que su entrega no puede ser decretada y anunciada,
ya que cuando se lo da no existe obligación de devolución en el o los receptores.
Sin importar la
circunstancia, el Amor no se puede
medir, no hay manera de contarlo, no es negociable, ni un ítem contractual
legalizado.
Admito que te gustaría disponer
de algún tipo de garantía cada vez que lo das, pero su entrega no contempla
ningún plan de pago escrito, verbal u otra índole.
El Amor es una entrega libre,
no una contratación regulada por disposiciones de la ilusión ajenas a Mí y a la
Divinidad que incluye a esta Energía.
Para que me entiendas,
deja por un momento al Ser humano imbuido de pensamientos propios de la ilusión
para que no busques medir lo inmedible, ya que el Amor del que te hablo no es
una oferta al mejor postor, es la Energía que nutre tu corazón, el Mío y el de
todos, en toda la Creación.
Si lo haces, tu Espíritu y Alma, captarán esta intención y te permitirán abrir tu mente con una visión propia del corazón, entonces te maravillarás al comprender la magnitud de esta Energía y que el Amor no tienes límites.
Entenderás que no
necesita de proclamaciones, condiciones, avisos, regulaciones y declaraciones
porque es totalmente libre como tú, como Yo y como todo lo que te rodea,
incluido el más allá de tu realidad actual.
Comprenderás que la
capacidad de amar de todos es Infinita, incluida la Tierra con todos los Seres
que viven en Ella.
Por supuesto, no
olvidemos a aquellos de Mis Hijos que
coquetean con la oscuridad, aunque no se destaquen ni eleven a través de esta
capacidad, en su interior la poseen a pesar de su ambición por dominar,
controlar y subyugar, esto también incluye Amor,
aunque esté mal entendido y usado con fines negativos.
Para acceder al verdadero significado del Amor hay que
contemplarlo con una visión desprovista de juicios, etiquetas, fachadas,
apariencias, impresiones, estilos o recuperación de una inversión.
El Amor es sinónimo de
dar, dejando que fluya con suavidad desde
el corazón que compartimos, sin resistencia, ni esperando resultados visibles.
Tal vez te resulte más
fácil entregarlo a los demás si me buscas antes en tu corazón, así comiences a
amarte a ti primero, de manera que este alcance te capacite para darlo luego a
otros sin demostraciones, sino por el simple hecho de compartir Nuestra Energía con todos.
Si percibes primero como
te doy Amor, entenderás a la lealtad que compartimos en Nuestra Unidad.
Entonces sabrás que cuentas con oportunidades preciosas para darlo sin temor a
riesgos, ya que es recíproco, por tanto iníciate en su entrega libre sin
cálculos o especulaciones fantasiosas.
Apreciarás su abundancia
y aprenderás a sostenerlo sin un sentido de deuda o desafío arbitrario, sino de
reciprocidad, porque en su entrega no hay resultados previstos, ganadores, perdedores, sólo de realización.
Amados
Hijos, por un momento salgan de las apreciaciones del mundo y aventúrense a lo
profundo de sus corazones para que me perciban y comprueben por sí mismos, la veracidad
de Mi Presencia y que el Amor que inunda a todos y el Todo, no conoce límites.
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