domingo, 16 de agosto de 2015

Servir con Humildad


Heavenletter # 5373 Publicada el 10 de agosto 2015




Dios dijo:



Querido, en ciertos momentos puedes encontrarte pensando que te gustaría ser un Salvador, sólo que ten cuidado con el ego porque puede quitarle a tu servicio un ingrediente fundamental, la Humildad.
Querido, en ciertos momentos puedes encontrarte pensando que te gustaría ser un Salvador, sólo que ten cuidado con el ego porque puede quitarle a tu servicio un ingrediente fundamental, la Humildad.

Algunos pensamientos te hacen desencontrarte con las intenciones puras y te empujan al egoísmo sin que te des cuenta.

Por esto ten cuidado y resguárdate del ego en el momento de ayudar a los demás.

Una forma de protegerte es no calificando desde la mente a tus acciones, más bien siempre ten presente a la Misericordia, no a la lástima, porque esta también es una manifestación del ego.

Antes de pensar en el mundo, comienza teniendo piedad por ti mismo, ya que así vas a ahorrarle Energía a tus pensamientos.

Ríete un poco más, para que transmitas una Alegría auténtica al mundo.

Esta Energía del Amor te reportará llaneza, modestia, sencillez y paciencia en el momento de ayudar.

Incluso si te gustaría escribir un libro con mensajes que les sirvan de apoyo espiritual a la humanidad, mientras lo hagas considera no presumir de vanidad, por intentar enseñar a los demás cómo experimentar sus vidas.

Siempre recuerda que en cada acto, pensamiento y palabras, sean escritas u orales, está presente la Energía de tus emociones y si no son acordes con una actitud humilde provocarás una tormenta.

Estima que antes de exponer tus pensamientos en un papel, primero debes tener calma en tu corazón.

Las palabras que surjan de tu mente deben provenir de tu corazón.

La Paciencia es otro ingrediente esencial para este propósito.

No te olvides que muchos aún están soñando y que tus palabras deben contener la suficiente Luz para ayudarlos a despertar y aprender a iluminar sus Caminos por sí mismos.

Esto no quiere decir que serás una Estrella en los sueños de los demás, ten cuidado, porque puedes quedar atrapado por el ego en el proceso.

Si sólo deseas hacer el bien a los demás, recuerda primero salvarte a ti mismo de la ilusión que impera en la realidad del mundo.

Pon tu propia casa en orden, aprendiendo a ser benevolente, amable, amoroso, alegre, confiado, paciente y otras tantas cualidades, contigo mismo.

De esta forma toda la gente que necesite Luz la captará en tus vibraciones y no necesitarás hablar o escribir para ayudarlos.

Desde tu propia Energía compartirás con ellos y les darás el empujón que necesitan para encaminarse en sus trayectos.

Ser un Faro de Luz que brinde Amor y Sabiduría a los demás, no requiere de palabras, pensamientos e incluso acciones, la sola Presencia del Ser basta para inundar de Luz a todos.

Amados Hijos, todos Uds. son Mostradores del Camino, pero desarrollar esta tarea requiere de mucha humildad, conocimiento de sí mismos, para que entreguen la Luz de Dios con Amor en sus corazones.







Servir con Humildad



Querido, la ilusión los confunde en sus Misiones, en el momento de prestar un servicio al mundo para ayudar a otros.

El ego requiere de propaganda para inflar la personalidad, mientras que la Conciencia del Ser sólo necesita del Silencio profundo en el corazón.

El ego se cree un gran conocedor de la Verdad y la proclama a los cuatro vientos a quien se presente, mientras que la Conciencia no la expresa, la manifiesta a través de la Energía que emana el Ser.

El ego pretende enseñar apoyado en la soberbia, como los demás deben vivir sus existencias, en cambio la Conciencia se apoya en el ejemplo y en la Presencia Yo Soy, sin pretender demostrar nada.

El ego usa anteojeras para mantener cerrada la mente con un velo e impedirle ver la Luz, en tanto la Conciencia se comunica con las frecuencias del Amor y la Verdad, para limpiar a través de la Energía todas las sombras que rodean a los pensamientos.

Cuando te amas a ti mismo lo suficiente, muestras tu Luz sin necesidad de hacer nada.

Esto es todo lo que tienes que hacer si quieres ser una Luz para tu familia, amigos, compañeros de trabajo y todos los que te rodean en tu cotidianidad.

Sólo así podrás iluminar y compartir con otros, evitando ser un mero reflejo de la Luz por estar ensombrecida por el ego.

Engánchate con la Luz, compártela con la humanidad y el mundo, pero antes acéptate, para que puedas experimentar el verdadero Amor en tu vida.

Cuando lo hagas no necesitarás escribir un libro, tampoco hablar sobre tu Verdad, ya que serás la viva Expresión del Amor.

Los Grandes Seres Espirituales no desean hacer buenas obras, porque no piensan en los demás en función de sí mismos.

Ellos no necesitan promover el Amor, son la viva representación de esta maravillosa Energía Divina.

Ellos no buscan el reconocimiento ni la auto-glorificación, porque saben que representan a la Gloria de Dios.

Ellos no se ponen en un pedestal, ni se sienten superiores a los demás, porque saben que todos son iguales.

Un Ser espiritual es un humano humilde que no predica el perdón, si sabe que guarda rencor en su corazón.

No predica sobre la Paz, si todavía celebra con una antorcha la ira en sí mismo.

No se deleita indicando que se debe hacer, si aún no hizo su propio trabajo o no sabe cómo hacerlo.

Simplemente ejecuta lo que considera que contempla Mi Voluntad.

Todo lo que hace lo realiza en Mi Nombre, no en el suyo, trabaja desde la Conciencia a Mi Servicio.

No se empodera a través de lo que entrega a otros, se fortalece a través de la Energía presente en su corazón.

Sabe perfectamente que es el Creador y Sustentador del mundo, ahorra Energía porque no requiere hacer alardes, obra desde la humildad.

Un Ser Espiritual no se somete a sí mismo a las presiones del ego, porque ya lo ha aunado con la mente y el corazón.

La atención de un Ser Espiritual no está puesta en hacer el bien, sino en prestar un servicio en Mi Nombre, entregando las frecuencias de Mi Energía de forma natural y espontánea, sin esperar nada a cambio.

Sólo sirven en el mundo siendo ellos mismos, en completo agradecimiento por Representarme y ayudar a instalar el Cielo en la Tierra.

Amados Hijos, si desean servir al mundo compartiendo Mis Bendiciones, agradezcan en lo profundo de sus corazones las que derramo en Uds. de continuo a través de Mi Amor, así entreguen con humildad Mi Energía a los demás.




No hay comentarios:

Publicar un comentario