Heavenletter # 5346 Publicada el 14 de julio 2015
Dios dijo:
Querido,
cuando te sientes desanimado compartes tu estado de ánimo con todo el mundo,
liberas tristeza y otras emociones más, con total olvido que puedes
reemplazarlas y distribuir la Luz de las Estrellas presente en tu interior.
Tal vez me contestes que
no sabes cómo llegar a la Luz de las Estrellas, pero con sólo
aspirar profundamente, absorberás suficiente Energía Estelar.
Muchas veces tus
comportamientos se ajustan al
pie de la letra a los conceptos del mundo y estas respuestas literales te impiden ver y atrapar las Estrellas.
El mundo no es un lugar
del que puedas esperar, en general, una gran inspiración.
El mundo no puede
mantenerte navegando en una corriente que te lleve al centro.
El mundo te seduce con
los sucesos de la periferia, sin guiarte a la principal recompensa, lo que es
más, en la primera de cambio, te suelta la mano y te deja caer.
En última instancia ,quien
se deja influenciar y caer eres tú mismo, ya que si percibes que la realidad
que te rodea está caldeada, retírate a tiempo para que no te quemes con sus
efluvios negativos.
Cariño, no tienes que incinerarte, una y otra vez, con las mismas situaciones que se presentan con un simple cambio de escenario, ya que el mundo no es lo suficientemente grande para la magnitud de tu Ser.
Aunque el mundo sea lo
suficiente denso para ti, nada te impide que nades hasta la otra orilla.
Seamos sinceros, tú eres
más vasto que el conocimiento que el mundo tiene de ti.
El mundo es vasto en su
superficie, pero aún no ha alcanzado la profundidad y altura suficientes, para
poder valorarse a sí mismo, por lo tanto, tampoco lo hará contigo.
Tú eres un Ser Divino que necesita expresarse en la
realidad del mundo, pero no desde los paradigmas habituales de la Mátrix y el ego.
Cuando todo está dicho y
hecho, lo mundano no inspira lo suficiente y tu interpretación de ti mismo
puede permanecer escondida, por dejarte guiar por la gente equivocada.
En cambio las Estrellas, pueden guiarte por el Océano Profundo del Ser e inspirar tu
corazón.
Tú corazón navega más
profundamente, ya que siempre desea ir más allá de la línea de salida.
Aprende a inhalar los medios
necesarios del aire que respiras, para que te reúnas con tu inspiración más
profunda en el interior de tu Ser.
Amados Hijos, el mundo
es más como una exhalación que los invita a barrer de un soplido, el poder de los
demás para poder superarlos, en cambio una inhalación profunda, hace que su Ser respire la Luz de las Estrellas.
La Luz de las Estrellas
Querido,
inhalar la Luz de las Estrellas es respirar en tu Ser Verdadero a Mi Hálito
Divino, que te ayuda a trascender por encima del poder ficticio del mundo.
Tú eres Mi Mayor Creación, de hecho constituyes
un mundo dentro de otro mayor.
La realidad del mundo va
a responder a tus percepciones personales.
No obstante, en el mundo hay mucho más
para ti de lo que te permites ver, pero mantén la mirada puesta en el
Cielo.
Tú sabes que eres Luz de las Estrellas sólo que pretendes
ignorarlo, porque consideras que es una realidad inalcanzable para ti.
Tú eres afín a las Estrellas, naciste de un Desprendimiento Cósmico de la Fuente y ahora estás gestando un nuevo nacimiento del Ser en ti.
Pese que eres Luz de las Estrellas, no obstante
recabas en los hechos y números del mundo, porque esperas que la realidad finita
te encienda e impulse hacia arriba.
Cariño, estás aquí para iluminar el mundo y puedo afirmar que buscas Inspiración Divina en los lugares equivocados.
En primer lugar, la
inspiración mora en tu interior y es un hecho que, tanto las Estrellas del Cielo
nocturno, como el Sol diurno, están dentro de ti.
Tú, Amado Niño, aunque te
parezca irónico, eres una ‘Mecha del
Universo’, por lo tanto cuando te busques a ti mismo, mira las Estrellas así enciendas tu interior.
La inspiración no es un
tren que corre en diversas pistas, tampoco es una Luz que está a la deriva.
Está claro que te
decepciones si sigues esperando que te llegue del mundo, siendo que tú eres tu
propio ‘dispensador de Luz’.
La
inspiración es tu propia Luz interior y nunca se agota.
Tu Alma es más poderosa
que la gravedad, no está anclada a la Tierra y por más que el mundo sea hermoso
no te confundas.
El mundo anhela tu Luz, tú
solo puedes iluminar la Tierra, entonces no esperes una Señal Divina que te ordene hacerlo.
La Tierra puede ser un
lugar de paso para ti, pero eso no significa que debas esperar una indicación
del Cielo para comenzar a hacer brillar tu Luz.
Amados
Hijos, dejen de recostarse tanto en los impedimentos del mundo y apóyense más
en la inspiración profunda de su Ser, para que se transformen en una Fuente
Divina que suministre desde su interior, la Luz de las Estrellas a la Tierra.
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