Heavenletter # 5338 Publicada el 06 de julio 2015
Dios dijo:
Amado
Mío, el Cielo está dentro de ti, no en el exterior, ni en otro lugar ajeno a la
Unidad, no lo busques en el mundo porque ya te ha demostrado que no te aprecia
lo suficiente.
No
estoy fuera de ti, estoy en tu interior, Yo Soy tú, y donde Yo estoy está el
Cielo.
Cuando niegas estar como
Uno Conmigo, te mueves a ti mismo
fuera del Cielo, te sientes aislado en la Tierra y te conviertes en un extraño para
tu propio Ser.
En este momento, te pido
que le permitas manifestarse al Ser que
está dentro de tu cuerpo humano.
Que Yo exista dentro de
ti es fantástico, pero no es una fantasía.
Tu vida actual es un
fraude, una falacia nutrida de ficción, que te hace caminar cuesta arriba, portando
un equipaje que no te corresponde llevar.
Dentro del rol que juegas, tú no eres ese
personaje desgraciado que profesas en la realidad del mundo.
Esto es un espejismo en
el que elegiste ingresar, con el único fin de descubrir tú verdadero yo y no para que quedes relegado al mero papel que desarrollas,
como un Ser humano ordinario.
El Ser humano es extraordinario, pero tú y todos tus hermanos son Seres
extraterrestres que se encuentran en la Tierra y provienen de varios
lugares del Cosmos.
Tú viniste y aterrizaste
en este planeta con el propósito de ayudar a la Tierra y a todos los otros
seres extraterrestres que viven junto contigo por un tiempo aquí.
En efecto, llegaste en
la misma Nave Espacial junto a
cientos de hermanos estelares por propia voluntad.
Seguramente, siempre lo
has sabido o sospechado que eres mucho más que un Ser humano ordinario.
No existen los Seres humanos ordinarios, en ti no hay
nada corriente, salvo la realidad común que compartes con los demás y el apego
a la materialidad del mundo.
La oscuridad te vendió
la idea que no eres un Ser especial y
tú la compraste dentro de un ideal al que te apegaste.
En todo el mundo ninguno de Mis Hijos es algo
normal, son Seres humanos bendecidos por
Mí que vinieron a glorificar el mundo.
Para bendecir la Tierra
no necesitas ser famoso, ya que viniste en Mi Nombre y aceptaste representarme,
entonces canta alabanzas a esta glorioso Misión
Galáctica.
Tal vez te gustaría
tener más notoriedad en tu trabajo, sin embargo, para cumplirlo y descubrir
quién eres requieres de modestia y humildad, más que a tu pequeño Yo.
En realidad debes
percibirte antes a ti mismo, para que los demás aprecien la Luz de tu Ser.
Amados
Hijos, deben reconocer que no aprecian lo suficiente a su Ser, ya que se
moldearon a sí mismos, desde los puntos de vista de carencia del mundo.
Falta de aprecio del mundo
Querido
Niño, cualquier persona cuya Alma no es apreciada por el mundo, llora por un
dolor originado en la ilusión de esa falsa realidad.
Tú y todos en la Tierra
nacieron de Mí Ser, pero han
descuidado a esta Conciencia en el Camino.
La dualidad de la
ilusión y la influencia de la Mátrix tienen efectos adversos, además les
raciona el concepto de la Verdad del Amor
desde que nacen.
Un hijo Mío no requiere de las medidas sociales, todos merecen aprecio
unilateralmente y cualquier racionamiento encierra un grave error.
Si este es tu caso, has
que deje de importarte, ignora lo que el mundo
piensa de ti, ya que siempre estarás rodeado de un sentido de falta de aprecio.
El mundo no puede darte lo que te merece y deseas.
El mundo no sabe cómo hacerlo, lo cual es una pena, porque todos están
revestidos de Divinidad en su Ser.
Sin embargo, esto está
bien, ya que es un componente de la realidad en la están todos.
No obstante, el aprecio que buscas en el mundo deriva de Mí,
de tu propio Ser interior.
Por esto que acabo de
explicarte, ninguno en el mundo tiene
puntos sueltos que requieran de denuncias que anuncien las carencias de los
demás y pongan de manifiesto a tus propias omisiones.
Mi Amor por ti y por cada uno de tus hermanos, compensa cualquier negligencia
que se cometa en el mundo.
Si te parece que alguien
en la Tierra no expresa palabras de Amor hacia
ti, no lo juzgues, tampoco huyas, ni le cierres tu corazón.
Permite que el Dios único que mora en tu interior te cante
sus alabanzas, así te sientas compensado por el descuido de otro Ser humano.
¿No crees que una palabra Mía te compensaría todos los insultos del mundo?
Pero esto te parece difícil e incluso imposible que funcione para ti.
Amados
Niños, entiendo que les resulte difícil auto-compensarse, ya que desde muy
pequeños aprenden a omitirse a sí mismos, por la falta de aprecio del mundo.
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