Heavenletter # 5252 Publicada el 12 de abril 2015
Dios dijo:
Querido,
ningún lenguaje puede describir nuestra Unidad, si tuviera que dibujar este
concepto lo haría con el mar en tus ojos.
Ningún idioma puede
describir a Nuestra Fusión dentro de la
Unidad, por eso estoy disparándote la imaginación con un dibujo que pueda
especificar Nuestra Forma.
¿Cómo podría plasmarme a Mí Mismo dentro la ilusión?
El dibujo de una rosa, primavera,
hoja, gota, pétalo o Sol es entendible, pero ninguna manifestación de tu
realidad puede delinearme.
¿Qué diferencia habría que te sugiera me imagines como un viejo roble, con colores otoñales?
¿O con colores vibrantes afines al verdor que sugiere la plenitud del verano?
¿Tal vez un extensa y arbolada pradera donde retocen en paz un sinnúmero de bellos Seres?
¿Quizás como una gran Galaxia, refulgente por el brillo de sus innumerables Soles?
¿También podría ser un gran Océano que refleje el azul del Cielo y la Luz de las Estrellas?
De cualquier manera, así
como las palabras no pueden expresar la Unidad
de Nuestro Ser, tampoco ningún dibujo puede pintar al Uno que conformamos.
Tal vez la solución se
encuentre en volver a pintar tu Memoria para
que, cada día y a todo momento, notes la presencia de Mi Mirada en tus ojos.
Podrías ver lo mismo que
Yo, el Infinito y la Eternidad.
¿Me pregunto si sería posible pintar todo el Infinito y la Eternidad?
Probablemente sólo se
podría delinear un ínfima parte de la Eternidad e Infinito, la que se
manifiestan en tus ojos.
Para pintar la Inmensidad no hay papel lo
suficientemente grande, que pueda albergar su profundidad.
La Inmensidad que Yo veo en la profundidad de sus ojos,
supera lo que imaginan como belleza en su realidad lineal.
Dondequiera que dirija Mi Mirada se supera a sí misma.
En el mundo es posible
pintar la belleza de un bebé, reflejar el ocaso de la edad, el movimiento de un
autobús, el amor de una pareja, la camaradería de una mascota, la simpatía de
la amistad, el afecto de un hijo, incluso plasmar las distancias entre la
Tierra y el Sol, pero no la Realidad Divina.
Amados Hijos, cuando se trata de la Unidad de Nuestro Ser,
ninguna manifestación lineal puede plasmar a la Inmensidad, aunque cupiera el mar en
sus ojos, tampoco podrían hacerlo.
El Mar de sus Ojos
Querido, tal vez pienses
que estoy dificultándote la percepción.
Sin embargo, estoy
impulsándote para que busques en tu interior a este recuerdo.
Esta Memoria que buscarás es el recuerdo de ti
mismo y de lo que eres, estés o no Conmigo.
Aunque te rodee un Aura, tu cuerpo no es un parámetro que
refleje el verdadero resplandor de tu Ser.
Podría decirse que ahora
estás detenido en la densidad, pero cuando te dispongas a buscar tu Luz, podrás
saludar a tu Ser y sorprenderte de su luminosidad.
Incluso en este
momento puede haber descendido y estar caminando contigo, aunque a nivel interior desconozcas su manifestación .
Todo en la Tierra es un Milagro ardiente, cada cabello,
movimiento, latido, color, textura, sonido, sabor, visión, olor e infinidad de
cosas más, encierran al maravilloso Arte
de la Creación.
Cada coreografía de la
Tierra alberga a la Armonía de un
Milagro Divino.
Cada uno de estos
Milagros lo puse para ti y todos tus hermanos, incluidos sus cuerpos, que los he
creado para que alberguen sus Espíritus mientras están en la Tierra.
Sin embargo, el olvido
los ha vuelto intolerantes, poco receptivos e incluso descuidados en el momento
de brindarse Amor a sí mismos.
Tú eres un fiel reflejo
de Mi Amor, eres lo más bello que
jamás he visto.
Te he creado como un Ser Infinito y Eterno, si Yo no te doy la espalda ¿por qué no te reconoces y te ignoras a ti mismo?
¿Cuál es la causa?
¿Por qué las percepciones del mundo te mantienen rezagado, por no ser lo que esperan de ti?
Tú eres la suma del Todo y lo que se mueve en los Caminos del mundo.
Tu Camino parte del Mío,
por lo tanto, tú eres Yo Soy.
Cualquier Camino que
tomes, en esta u otra realidad, siempre eres Yo Soy.
Tú eres Dios, entonces estoy
en cada átomo de tu Ser.
Yo estoy en cada fibra
de tu ADN, en tu corazón, mente,
órganos y
en todo lo que compone tu cuerpo.
Yo Soy en cada expresión
de tu cara, incluso
en los pensamientos extraviados de la densidad.
Nada en tu vida, cuerpo
y Ser, está al margen de Mí.
Todas las cosas,
animadas e inanimadas del mundo,
son Yo
Soy.
Yo
estoy aquí, allá y en todas partes.
Cuando te descubras a ti mismo en Nuestra Unidad, podrás decir que tú eres donde Yo Soy.
Llegará un momento que no necesitarás llenar ningún vacío o preguntarte quién eres y dónde estás.
Sabrás que estás en todas partes, la Eternidad e Infinito, junto Conmigo.
Llegará un momento que
si alguien te preguntará dónde estás y le dirás:
“Yo Soy y estoy en la Unidad con Dios”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario