Heavenletter # 5218 Publicada el 09 de marzo 2015
Dios dijo:
Querido, nada y todo es
importante, aunque para la mente humana algunas cuestiones importen más que otras,
sin embargo hay algo que no siempre tienen en cuenta y es ser justos con el Mundo.
La muerte parece
singularmente importante para ti, aunque no sea así esto constituye un hecho
en tus creencias.
Para alguien
más, las pequeñas cosas, como una brizna de hierba en el desierto, constituyen
un tesoro.
Mientras que en otros
lugares, una brizna de hierba significa pasto para segar y, por lo tanto, una
carga o tal vez un medio de vida.
Esto viene a demostrar
que todo en el mundo es relativo.
Para muchos o la mayoría
de Mis hijos, la idea que el mundo no
es tal como lo ven, les resulta difícil de digerir, porque de diversas maneras,
piensan que algo es fijo e inviolable.
Pero sea aquí o allá, en el sur o en el norte, tanto tú como tus
hermanos y el mundo cambian a cada momento y en este sentido nada es estático.
Sin embargo, estás
convencido que sabes lo que es la Verdad, lo que es bueno y malo, a medida que
juzgas cada día.
Se podría decir que juzgar,
te parece algo normal a ti y a los demás.
Sabes que es mejor no
juzgar, pero no puedes abstenerte de hacerlo a izquierda y derecha.
Pero cuando juzgas a los
demás, lo haces contigo mismo y Conmigo, puedes emitir juicios que te
despierten culpa.
En ciertas ocasiones,
aciertas con tus juicios y te aplauden.
Pero, de una forma u otra, cuando lo
haces, tratas de escudriñar la reacción del mundo a medida que clasificas a los buenos
y malos, favorables o desfavorables.
Vivir en la Tierra, a veces,
puede parecerte un doble vínculo.
Esto no quiere decir que
lo que piensan y sienten sea poco importante.
Lo que piensas y las
sensaciones que te producen son de suma importancia.
Influyes en el mundo según cómo pienses y cómo te
sientas al respecto.
Cariño, tu percepción
hace toda la diferencia en el mundo y
tu propio derecho te apoya en este sentido.
A través de tu
percepción, es como concibes el mundo.
Para ti el mundo puede
ser encantador un día y tedioso el siguiente e incluso cruel.
Amados Hijos, sólo sé, que la forma que piensan y sienten, contribuye con el aspecto que el mundo tendrá mañana.
Ser justo con el Mundo
Querido, citemos el
ejemplo de cuando asisten a una sala a ver un espectáculo cualquiera:
Alguien puede comentar que fue divertido lo que vio.
Otro puede decir que fue aburrido.
Un tercero puede objetar que carecía de sentido.
Mientras uno más, puede expresar que no lo entendió.
Ahora te pregunto lo
siguiente:
¿Estos comentarios reflejan al espectáculo o a la persona que hace lo hace?
¿Cuando estás de mal humor un día y alegre al siguiente, tus estados de ánimo aluden al día o a ti?
¿Cuándo es así, a quien escuchas, a tu corazón o al ego en tu mente?
Cariño, las variaciones
de tu humor son porque no escuchas la Verdad de tu corazón y, en parte, es porque no crees en ella.
Podría decirse que en el
mundo los pensamientos son reciclados, se transmiten de una persona a otra, a
los grupos, hasta que se generalizan.
Si te detienes un
momento, podrás observar que el mundo cambia ante tus propios ojos.
Tal vez no logres ver
esto, porque no tienes la atención puesta frente a ti, sino atrás o focalizada
en lo que te indicaron que debes ver, creer y apoyar.
No puedes fijar la vista
en lo que se encuentra frente a ti, debido a las ideas fijas que te enseñaron a
cultivar.
La esclavitud del mundo que aprisiona y comprime a tu Ser
es porque tú se lo permites.
Tú provienes de un lugar
de Entendimiento, con amplias posibilidades que puedes ofrecérselas al mundo.
Si quisieras, podrías
brindarte la oportunidad de Ser tal como quieres y compartirlo con el mundo.
Desde mi visión, más
parece que eres tú quien mantiene esclavo al mundo, por las limitaciones en las que te sumerge el ego.
Corazón, el mundo es tuyo, lo heredaste de Mí,
pero escuchas más los dichos de otros, de los medios, que a Mi Voz en tu
corazón.
Incluso, tienes más
arraigadas las enseñanzas de la Mátrix
sobre la vida, que todas Mis Palabras
sobre la Eternidad de tu Espíritu.
Te pido que seas más
cortés en tus expresiones sobre el mundo,
porque a través de tus palabras,
pensamientos, emociones y acciones, influyes en las percepciones de los demás.
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