Heavenletter # 5212 Publicada el 03 de marzo 2015
Dios dijo:
Querido, no sobrecargues
tu mente con pensamientos reflexivos e irreflexivos al mismo tiempo, para que
puedas colmarla con la Felicidad de estar vivo.
Cuando sobrecargas tu
mente, te impides pensar en decisiones que ejerciten el Libre Albedrío en tus opciones.
Hacer malabares con
muchos pensamientos, te significa oscilar y esforzarte para mantener el
equilibrio en las múltiples acciones que intentas desarrollar.
Esto no te lleva a
ninguna parte y, con seguridad, pensaste o escuchaste, que es preferible dar un
paso a la vez, en lugar de empujarte a ejecutar muchos simultáneamente.
Cuando te decides a
otorgarle a cada evento un turno, según el grado de importancia dentro de tu realidad, consigues
acompasarte con la vida.
De lo contrario,
revistes de una gravedad innecesaria a circunstancias simples y las transformas
en problemas y preocupaciones del ego.
La única gravedad en
el mundo que debes considerar, es la que te mantiene anclado a la Tierra, las
demás están destinadas a conturbar tu Ser
con los entretejidos del ego.
Cariño, busca aligerar
tus pasos en la vida, llevando más brillo
a tu mente, a través de Mi Luz en tu
corazón.
Te posibilitarás abrir
una ventana al mundo, te sostendrás en la más alta frecuencia de Nuestra Hermosa Energía.
La gravedad del ego es el cuello de botella que fragmenta tu vida.
En cambio, si usas la Luz de tu corazón, no sólo aligeras
el paso en la vida, también rodeas de Paz,
equilibrio y serenidad a tu mente.
Dejas de enfocarte en la
individualidad, para funcionar a la velocidad
de la Luz del corazón, que te alivia el peso y te hace volar, en vez de
caminar.
Los asuntos mundanos
siempre están revestidos de gravedad, de tal forma que ocupan un primer lugar en
tu vida.
Sin embargo, tus deseos
no deben estar cubiertos de una seriedad ficticia, para que tenga cabida en la
vida del mundo.
Esta falsa creencia hace
que, en el momento de buscar algo que quieres, te golpees contra las barreras
del ego.
Incluso lo haces con
los demás, para sacarlos de carrera y evitar que lleguen antes que tú.
En cambio el corazón te
dice que si quieres algo, vayas tras este deseo, sin apresuramientos y sin
correr.
Permaneces dentro de los
límites de la velocidad de la Energía del
Amor, sin atropellar a otros en el Camino.
Esta simple intención te
posibilita que, en cuanto surge el pensamiento, tus sueños se manifiesten antes
de verlos.
Debes saber que la
fuerza de tus deseos pone en marcha a tus objetivos, sin necesidad de excluir
del todo a los demás o al resto de las circunstancias.
¿Si lo que anhelas es riqueza, qué harás cuando la tengas?
¿Qué vas a hacer con ella, viajar, comprar o construir una casa más grande para ti mismo?
¿Realmente crees que tendrás más Felicidad con una casa más grande, un coche excepcional u otras cosas materiales?
¿Piensas que colmarán de bendiciones tu vida en el mundo?
Amados Míos, la Felicidad no está fuera de Uds. reside en
el interior de cada uno, aprendan a alegrarse de estar vivos en la
Tierra en esta existencia.
La Felicidad de estar vivos
Querido, presta más atención
a lo que te dará Felicidad a largo
plazo.
Sal de los paradigmas
que te hacen pensar en la Felicidad como
sinónimo de cuestiones materiales.
La Felicidad por estar viviendo en este aquí y ahora, es un Conocimiento
que te permite disfrutarla en tiempo presente.
La Felicidad no vendrá a ti si la buscas en el exterior, lo hará
cuando medites y profundices en tu interior.
La creación de Felicidad no es sólo la materialización de circunstancias o elementos propios de la externalización del mundo.
Un verdadero acto
creativo incluye la internalización en tu Ser, sin olvidarte de ti mismo u otras personas.
La Felicidad interior no es un rato agradable en el mundo exterior,
incluye al reencuentro con tu Verdadera
Esencia de Ser.
Así es como adquieren un
nuevo sentido los pensamientos del ego,
que alimentan tus falsas creencias, sobre que estarás perdido en la vida si no logras
tus deseos materiales.
La Conciencia del Ser te hace olvidar al yo individual, por el reencuentro con el Yo Soy.
La falta de Conciencia sobre ti mismo, es lo que te
mantiene perdido dentro de la ilusión.
Cuando te amas
incondicionalmente, vives dentro de una Energía
que no requiere de exclamaciones, ni demostraciones.
Te permites Ser en un estado natural y respirar
las vibraciones de la Unidad contigo
mismo.
La Unidad con Dios no requiere de proclamaciones, simplemente Es en toda la Existencia del Ser.
La Sabiduría del Corazón no necesita que exclames a viva voz que eres un “Hijo de Dios”.
Este es un Conocimiento innato de tu Ser y una parte integral de Dios, que te sirve a ti y a Mí, para que disfrutemos la vida en la Tierra.
Cuando prestas un
servicio en el exterior, desde el corazón que compartimos, disfrutas con la
ligereza de la Luz, sin el peso del ego y prolongas esta Felicidad en el tiempo.
Cuando tu servicio parte
desde la Unidad de Nuestro Corazón,
es tan o más ligero que el aire, no está imbuido de un sentido del deber.
A tu Verdadero Ser no le sirve escuchar los
halagos o felicitaciones externas pertenecientes al ego.
Si prestas un servicio
desde el corazón, lo haces en Mi Nombre,
te premia con la Alegría natural del Amor
Incondicional, no eres más de lo que ya eres en realidad.
Hijos Míos, todos están
hechos a Mi Imagen y Semejanza, aquí está
la cimentada la base para que sientan la Felicidad de estar vivos en este
momento, en una experiencia en la Tierra.
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