Heavenletter # 5166 Publicada el 16 de enero 2015
Dios dijo:
Hijo Mío, los errores suceden, son cuestiones temporales que no necesitas
hacerlos crecer para te arruinen la vida.
Haz las paces con el pasado, deja ir a las malas interpretaciones, no cometas
el error de retenerlas.
Perdónate a ti mismo y a los demás, de tal manera que hagas un paso al
costado y te impulses en la vida.
Si quieres avanzar en la vida, tienes que salir del pasado, sin importar
los errores que hayas cometido.
Haz mea culpa, sacude la mochila para que sustituyas el equipaje, así
camines renovado y con menos peso.
Llevar el pasado a cuestas es igual a caminar con una piedra alrededor del
cuello.
Reconozco que puedas sentirte responsable, sin embargo, necesitas otorgarte
libertad para que puedas salir de la servidumbre del pasado en el presente.
Deja de condenarte a ti mismo con pesar y dolor, haciendo las paces con lo el pasado.
Tú no eres el mismo de ese momento, incluso no eres igual al de una hora atrás.
Permítete Ser verdaderamente, sal
de los esquemas del ego y la Mátrix social.
Reconoce los errores de tus decisiones, perdónate, límpiate la culpa y
continúa avanzando.
La culpa es una asignatura con una larga lista de delitos auto-inculpados.
Si nadie más te perdona, perdónate a ti mismo.
Amados, perdonarse a sí mismos significa dejar ir el lastre del pasado,
sin importar la magnitud del error.
Libre Albedrío
Querido, el ejercicio del perdón te significa dejar de sumar decepciones de
ti mismo.
No puedes almacenar más allá de los remordimientos.
De hecho, es hora que lances lejos a ciertos errores y en lo posible a
todos.
Despídelos, sácalos de tu Ser.
No ensombrezcas tu Alma con estos
recuerdos.
¿Si Yo no te condeno, por qué lo haces tú?
¿Por qué te aferras a energías de baja vibración?
¿Dónde reside la causa que te impide expiar el pasado?
¿Por qué te obstaculizar la elevación?
Hijo querido, tú eres una Chispa
Divina, un Desprendimiento de Mi Ser,
estás hecho íntegramente de Luz.
Viniste para iluminar la Tierra con la Luz de Dios, no ha oscurecer tu Ser
con las sombras del ego.
Te otorgué Libre Albedrío para que dispusieras de mayor Libertad.
¿Entonces por qué no usas estas dos valiosas herramientas para desprenderte de la culpa y remordimiento de los supuestos errores que cometiste?
Déjalos a un costado de tu Camino, mejor aún, entrégamelos a Mí para que
los purifique en la Fuente y aligeres el paso.
La acumulación de errores no sólo atentan contra tu confianza, autoestima, Amor y Bondad hacia ti mismo, sino también
contra tu propia Alegría y Felicidad.
¡Santo cielo, piensa en todas las veces que tomaste decisiones acertadas, sin cometer ningún error!
Los errores son accidentales, no son intencionales o deliberados.
Si tienes que acusarte de algo es de apresurarte a tomar una decisión, de haberte basado en suposiciones inciertas que te impidieron ver con cuidado todo
el panorama.
Amados Hijos, tienen que entender que los errores no les pertenecen, no necesitan mantenerlos y fomentarlos con su propia Energía.
Hacer las paces con el pasado
Querido, no tienes que cargar con los errores como si fueran bienes
preciados, tíralos a la basura, al aire, un pozo o donde quieras, para líbrate
de ellos.
Los errores son la angustia del pasado
y este es un peso innecesario que oscurece tu corazón, Conciencia y Alma.
Reconoce las equivocaciones, pero no dejes que te limiten, extrae las
enseñanzas y luego haz borrón y cuenta nueva.
Entre Uds. hay un adagio popular que dice “errar es humano, perdonar es divino”, donde me atribuyen a Mí la
facultad de absolver sus culpas.
Sin embargo, estas percepciones encierran un error.
Tú estás hecho a Mi Imagen y Semejanza, entonces dispones de la facultad
divina para perdonarte a ti mismo, por lo tanto hazlo para que dejes de
acumular lastre.
Sal de la temporalidad de tu realidad, intenta solucionar lo que pincha y desinfla
tu Energía.
Tienes suficientes habilidades que te capacitan para arreglar todo lo que
te limita.
No descuides la Luz de tu Ser, para que no camines a oscuras, si hay algo
que debes abandonar son tus errores, déjalos a un costado de tu Senda y sigue
con tu vida.
Los errores acumulados son pensamientos limitantes del ego, reemplázalos
por otros que sean más luminosos.
Concentra tu atención en el Sol que cada día te ilumina desde el Cielo,
escucha el susurro de las hojas mecidas por el viento, disfruta de la
frescura del aire, capta la melodía que entona la Naturaleza a tu alrededor.
¿No te parecen estas opciones más saludables para la vida, que prestarle atención a los errores del ego?
Los placeres mínimos de la vida te ayudan a avanzar y elevarte, mientras
que los errores son como gusanos que te corroen el interior.
Bórrate de la cabeza el sello del error y reemplázalo por el símbolo de la
Luz, ya que si estás en la Tierra no es por un error.
Hijos queridos, hagan las paces con
el pasado, limpien los errores que los aprisionan, así sostengan la marcha
en el Camino de Regreso.
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