" Velar por el propio Bienestar - CAMINO A LA GRACIA DE DIOS

sábado, 8 de noviembre de 2014

Velar por el propio Bienestar


Heavenletter # 5091 Publicada 02 de noviembre 2014


Dios dijo:



Querido, tal vez ya sepas como velar por tu propio bienestar a nivel externo.
Querido, tal vez ya sepas como velar por tu propio bienestar a nivel externo.

Sin embargo ¿Qué podría hacer tu corazón para avisarte sobre algo en verdad beneficioso para tu Ser?

Yo no estoy hablando de hechos o pequeñas cosas verificables.

Los hechos no son aliados de la Verdad.

Los datos van y vienen, al igual que los cambios que gestan.

Está claro que tu intelecto puede influir en tu corazón.

El intelecto puede ser un usurpador que se ampara en la seguridad del Conocimiento, Entendimiento y la lógica.

Tu mente usualmente, se refugia en la lógica que escucha en el mundo miles de veces.

Por lo general, esto contiene variables falsas que te impresionan y prevalecen por encima de la Verdad.

Amados, la Verdad a la que me refiero es la Inmutable, Infinita, Eterna Unidad de la Vida, el Alma y el Amor mismo.




Unidad con Dios



Querido, tal parece que el Amor fluctúa en la Tierra.

Pero la Unidad del Amor Eterna y Pura a la que estoy refiriéndome, no es ese sentimiento que se pierde y da la espalda, según lo acostumbrado en la Tierra.

No es ese Amor de un día, transfigurado en otra cosa al siguiente.

El corazón sabe del Amor Verdadero, en cambio la mente está programada para desconocerlo.

Pero, en algún nivel, por influencia de la mente piensas que tu corazón se ha equivocado y aunque te envíe señales de alarma, sólo captas una vaga e incierta sensación de lo que te dice.

Así es como descuidas tu corazón, quizás sea por la influencia de alguien que te convenció y fuiste fácil de disuadir.

Respecto a las Verdades Eternas de la vida, tu corazón es el que más sabe sobre ellas.

Eso es porque Yo vivo en tu corazón y nunca estoy desconectado.

Nada ni nadie, puede hacerme dejar tu corazón, porque Somos una Unidad inseparable.

Amados, su Ser y Yo Somos Uno, no sólo a veces, sino siempre y nada puede separarnos.




Escuchar a Dios



Querido, tú y Yo compartimos la misma longitud de onda, aunque el receptor se desactive.

Pase lo que pase, como Emisor, no detengo ni un solo instante mi transmisión.

Hay momentos que falta conexión entre ambos, pero no es porque Yo esté apagado o desconectado, sino porque tú bloqueaste Mi Señal.

Que no me puedas recibir, probablemente para ti no sea una sorpresa.

A nivel consciente, la mayoría de las veces, tienes dificultades para recibir Mis Mensajes.

Esto es porque dudas de Mí Existencia y te apoyas en otros dioses que antepones a Mi Presencia.

Esfuérzate por escuchar Mis Susurros en lugar de los mensajes, rumores e historias que son disparadas por el mundo.

No le des tanta fuerza a las exclamaciones del mundo, así no compares, ni confundas a los mensajes de todos los demás con los Míos.

Amados, la comunicación externa es cómo el tiempo, que infinidad de veces resulta ser contrario a lo que esperaban.




Velar por el propio bienestar



Querido, ¿a quién vas a escuchar, a Mí o a los rumores externos?

Si tú y Yo no llegamos a un acuerdo, las probabilidades indican que no me has entendido.

En algún momento, puede haber una interferencia entre la Verdad, tu lengua y tu mente.

Admite que pueden ser caprichos del ego en tu mente.

Cuando me escuchas realmente, sin lugar a dudas, no haces malas interpretaciones de Mi Mensaje.

Siempre recuérdate que una misma Verdad expresada a ti y a los demás, puede no ser interpretada de igual forma por todos.

Admite la veracidad de este hecho, para que no des credibilidad a los decires de cualquiera en la Tierra, en detrimento de un Mensaje del Cielo.

Lo que te digo no necesita de mucha reflexión, ¿no es cierto?

El quid está que no estás seguro que Yo esté en el Cielo, piensas que es una fantasía de tu mente o de alguien que te está jugando una mala pasada.

Sin embargo, en medio de toda esta confusión, ya conoces lo que es Verdad y lo que es parcialmente cierto.

Si es parcialmente cierto, no es lo suficientemente bueno y tú no quieres Verdades a medias.

¿Quieres sólo la Verdad inquebrantable, la Única y nada más que sólo la Verdad?

Amados, inclínense ante Mí que Soy la Única Verdad que vive en sus corazones, no lo hagan por Mí sino por Uds., para que velen genuinamente por su propio Bienestar del Ser.


No hay comentarios:

Publicar un comentario