Heavenletter # 5093 Publicada el 04 de noviembre 2014
Dios dijo:
Querido, tú eres un
huésped de dulce celebración para Mi Corazón.
Te llevo en Mi Corazón,
podría decir que eres Mi rompecabezas e indudablemente te amo.
Te amo con todo Mi
Corazón y esta es otra manera de decir que eres Mi mayor Alegría.
Con lamento o sin él, en
tierra o mar, tú siempre será Mi mayor Alegría.
Tú eres la Alegría de Mi
Corazón, doy las gracias por la Felicidad que me das y emana de tu Ser.
Amados, todos están en
el Corazón de Dios, me proporcionan una gran Alegría, mientras que Yo con Uds.
no lo hago.
Unidad indivisible con Dios
Querido, ¿Por qué no Soy tu Alegría? ¿Por qué no?
¿Por qué si eres tan querido por Mí, te mantienes tan alejado de la Alegría de Mi Corazón?
Con seguridad proviene
de tu falta de fe en ti mismo lo que te hace dudar sobre Mí.
Nuestra situación es como
si tú y Yo estuviéramos sentados en una nube, subidos en un subibaja, mientras
Yo subo, tú bajas y así sucesivamente.
Así es como también tu
Conciencia sobre Mí, fluctúa de arriba hacia abajo.
Nosotros dos compartimos
la vida desde siempre, Nuestra Unidad es Eterna y siempre ha sido una
constante.
Nuestra Unidad no es
impredecible o al azar.
Si la pensaste de esta
forma y la experimentas así, mensura que este pensamiento es una imposibilidad.
Esta idea no puede ser,
tú y Yo Somos Uno e infalible a toda prueba, eso es todo.
Amados, no les hablo de lo que será o va a pasar entre Nosotros o a Uds.
Bendiciones Divinas
Querido, Yo no salto sobre
cada uno de Mis Hijos para sancionarlos o beneficiarlos.
Yo no lo haría y no puedo
hacerlo, Me encanta tal cual son en su totalidad cada uno de Uds.
Todos participamos de la
misma danza.
Esto es superior a un
baile tradicional donde cada figura se mueve por su cuenta.
Aunque cada cual ocupe
su lugar, nunca pienso en hacerte tropezar un día, para recompensarte al
siguiente y así sucesivamente.
Nunca atentaría contra
un Hijo Mío o cualquier componente de Mí Creación.
Siempre multiplico mis
bendiciones para todos y cada uno, lo haría incluso si hubiera uno solo.
Corazón, Nuestro Abrazo
es Eterno e Infinito y cada uno de Uds. baila a su propio ritmo desde lo que
sabe.
Podríamos decir, que el
mundo tiene sus propios efectos negativos en ti y no es casualidad que tú estés
ahí en este momento.
Amados, cuándo, cómo y
por qué les ocurren los distintos eventos en sus vidas, no obedecen a un
destino diseñado por Mí, sino el que Uds. se diagraman con la forma que deciden
bailar en sus existencias.
Vida de ilusión
Querido, en cierto sentido
tú eres quien convocas a tu plataforma de baile a los personajes con los que
danzarás.
Incluso diseñas los pasos que ejecutarás, el ritmo que le imprimirás y la música que
te acompañará.
Sin embargo, puedes
cambiar a todo o dejarlo igual, según como resuene en ti el eco de las
palabras con las que te hablas a nivel mental.
Puedes escucharlas y conservarlas
contigo o desecharlas y reemplazarlas según tu parecer.
Te estoy hablando del
sueño llamado vida en la Tierra y de la manera que tu imaginación impulsa a
esta ilusión.
La vida juega según las
fichas que utilizas para aventurarte y apostar.
Según como la juegues te parecerá un desastre o una maravilla.
Corazón, otórgate un poco
de crédito a ti mismo, asume la responsabilidad y no a la llamada culpa.
Amados, tal vez comienzan
un baile en particular, con los pies en tierra firma y de pronto se encuentren
que están en el aire, sin embargo, no es necesario que tengan una caída libre.
Corazón de Dios
Querido, si estás en un descenso conserva la posición y desde esa ubicación particular, impúlsate para
seguir avanzando sin caer.
Si no consigues
sostenerla e igual te caes, levántate y sigue avanzando.
La vida en la Tierra
tiene un final, independientemente de las subidas, bajadas e incorporaciones.
Todo es un espejismo,
una ilusión poderosa.
Estás fascinado con este
espejismo que te envuelve, levanta y arrastra hacia abajo.
Todo el tiempo estás
cumpliendo con un pequeño papel en el escenario llamado vida del mundo.
Antes de ingresar en él, sabes que serás un actor con un cierto papel, pero lo olvidas en el instante que
entras.
Sin importar el
desarrollo pasado o presente de la trama, recupérate antes que la cortina
caiga, para que disfrutes de los aplausos.
Amados, aunque no
recuerden y por momentos no sepan cómo seguir en sus actuaciones, no olviden
que todos y cada uno, permanece en el Corazón de Dios.
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