martes, 16 de septiembre de 2014

El arte de la preocupación

Heavenletter # 5038 Publicada el 10 de septiembre 2014



Dios dijo:



La preocupación es un parásito para tu alma
Querido, escúchame cuando te digo que no hay nada para preocuparse.

En este momento no tienes que preocuparte, no sé por qué pasas la mitad del tiempo desasosegado e inquieto.

Sientes que algo no identificable está colgando sobre ti y, en realidad, te estás preocupando por una vaguedad.

Si cuando la preocupación te asalta no le hicieras caso, posiblemente dejarías de prestarle tanta atención y dejarías de buscar sus motivos.

Amados, en esencia ¿Qué es lo que los preocupa tanto?




Acción parásita de la preocupación



Querido, la preocupación es un parásito para ti.

No sabes cómo hacerle frente a sus consultas y a la ansiedad que despierta dentro de ti.

¿Por qué te haces cargo de la ansiedad que te provoca? 
¿Por qué la preocupación te preocupa tanto? 
Disponer de un enfoque para enfrentarla, también te preocupa.

Como si la preocupación fuera una medida de seguridad que te ofrece la dispensa de sus causas, para que no te preocupes.

Entonces,

¿Por qué te preocupas sin causa?
¿Acaso te sirve de entrenamiento si te rodeas de preocupación?

Cariño, seamos realistas, te has convertido en un experto en preocupación.

Te has convertido en un angustiado profesional.

Amados, practiquen menos las técnicas de la preocupación, sean novatos en estas lides, mejor aún, no se preocupen en absoluto.




Trascender la preocupación



Querido, la preocupación te detiene y paraliza tu Ser.

Tú mismo oscilas y te tambaleas por la preocupación, cuando abusas de ella.

La preocupación te trae más y mejores preocupaciones.

Cariño, te pido que desistas de la preocupación, no la necesitas en ningún momento, sal de sus garras.

Si los acontecimientos vienen acompañados de preocupación, deja que ocurran sin nutrirlos por tu parte.

Tú viniste a la Tierra para purificar la forma hombre sin preocupaciones.

Amados, todos están aquí con el propósito de trascender más allá del alcance de la preocupación.




Libre de preocupaciones



Querido, aprende el arte de ser libre de preocupaciones.

La preocupación es una distracción que te lleva lejos del Ser.

La preocupación te mantiene al borde del peligro, es un pasatiempo nocivo y de alto riesgo.

La preocupación no es para nada buena, te impide dormir por la noche porque te oprime.

Deshazte de la preocupación, no te dejes seducir por ella.

No necesitas una habilidad especial para desprenderte de ella.

A menos que quieras quedar cautivo de la preocupación, mientras buscas una cualidad para desembarazarte de sus zarpas.

Amados, la preocupación los corroe de igual forma que lo hace el óxido con un metal.




Desapego de la preocupación



Querido, 

¿Vas a permitir que la preocupación te carcoma por dentro?
¿Qué es lo que te genera tanta preocupación? 
¿No será el ego el que te juega una mala pasada?

Finaliza con las preocupaciones a medida que vayan apareciendo.

Concluye con el apego a la preocupación, emprende la retirada de su entorno, experimenta la vida en otro plano de la existencia.

Ahora, en este presente, es el momento para que desistas de la preocupación.

Despega a tu Ser de los dedos atenazantes de la preocupación, ya que son manipulaciones del ego, por lo tanto no son reales.

La preocupación es contraproducente, no te ayuda en absoluto.

Amados, las preocupaciones que se agolpan y los empujan a seguir su trayectoria, les exige seguir su propio ritmo.




Sin la influencia de la preocupación



Querido, lo único bueno acerca de la preocupación, es cuando reconoces su insignificancia porque te son innecesarias.

Cuando logras desapegarte de la influencia de las preocupaciones consigues alivio, porque sus ausencias son reconfortantes.

Aprende a deshacerte de ellas antes de su aparición.

No obtienes ninguna ventaja con las preocupaciones, no te son de ayuda, se engrandecen a sí mismas, mejor dicho al ego.

Así como limpias tus zapatos antes de entrar a tu casa, deja también a las preocupaciones molestas en la puerta.

Amados, mantengan fuera de sus mentes a las preocupaciones, no les permitan el ingreso, ¿Por qué deberían dejarlas entrar?




El arte de la preocupación



Querido, las preocupaciones son crueles y mezquinas, te roban la paz mental.

Ellas te crean problemas y miedo, destierran a la paz y tranquilidad de tu Ser.

No existe ninguna razón para que las acojas, dándoles la bienvenida.

Las preocupaciones son intrusas que te estrellan en la vida.

No tienes que dejarlas entrar, ni jalar de ellas.

Las preocupaciones son ladrones nocturnos, cuya ilegalidad apagan la señal de alerta y protección del Ser.

Libérate del peso de las preocupaciones, porque al hacerlo te honras a ti mismo, a tu vida y a Mí.

Déjame entrar, así permanezcas Conmigo, fuera de las preocupaciones.

Sustituye a las preocupaciones por Mí y mira como tu vida se dispara.

Seremos Unidad, como Uno iremos muy lejos, permaneceremos siempre juntos.

Las preocupaciones son algo insignificante, no te dejes llevar por ellas.

Amados, no le den cabida en sus mentes al “arte de la preocupación”, vivan con la Alegría de Mi Amor.


No hay comentarios:

Publicar un comentario