Heavenletter # 4905 Publicada el 30 de abril 2014
Dios dijo:
No existe una finalidad en tu vida aunque, a menudo y posiblemente, pienses que sí.
Cuando
estás pasando por un mal momento, puedes sentir que esto es lo único
que hay.
En
la Tierra, para sobrellevar tiempos difíciles y periodos
buenos, necesitan tanto de ida, cómo de vuelta, entrar y salir,
cualquiera sea el caso.
Fluir
de la vida
Todo
lo que existe en el mundo, fluye.
Tú
ere y, por lo tanto tu vida es.
Del
mismo modo que una salida del sol cambia con cada minuto ante tus
ojos, así también lo haces tú.
Una
salida del sol es hermosa, incluso durante el avance rápido hacia la
plenitud.
¿Acaso
no está cambiando el mundo exterior?
La
superficie también cambia y lo hace rápidamente.
Estados de ánimos
Uds.
tienen lo que se llaman estados de ánimo y pueden cambiar en un
abrir y cerrar de ojos.
Sin
embargo, la semilla depositada dentro de ti, sólo sabe de la
estabilidad de Mi amor y los regalos desmesurados que te doy.
Tú
eres un milagro que camina.
Tú
simplemente eres un milagro.
Tú
eres un milagro en el mundo y en el Cielo.
Tú
los alumbras con la luminosidad de tu Ser.
Liberación de la esclavitud
Tú
siempre has pedido y querido un milagro.
Ahora
te digo que tú eres tu propio milagro.
Tú
mismo eres lo que has estado esperando.
Has
estado esperando una liberación de la esclavitud.
Dentro
de ti hay un pozo profundo que ahora está brotando desde el fondo.
El
mundo también se está expandiendo a sí mismo.
Amados,
Uds. se expanden primero, para luego hacerlo el mundo, casi
simultáneamente.
Sorpresas en el camino
Entiendes,
que no hay nada más y que nada concluye.
Muchas
sorpresas agradables se acercan a ti, a lo largo del trayecto.
Tal
vez, te vuelvas hacia algunas de las maravillas que se encuentran en
tu camino.
Disfruta
ahora de la anticipación.
¿Por
qué no anticiparte?
¿Quieres
un camino seguro?
Sin
embargo y con frecuencia te quejas, porque no ves las sorpresas que
se encuentran en tu ruta.
¿Qué
no es así?
¿No
lo crees?
Puedo afirmar, con total seguridad, que no las ves.
Cualquier
sea el caso, tú te sorprenderás.
Comienza
buscando mientras avanzas, para hacer desaparecer a la decepción.
Cuando
acojas la bendiciones que se encuentran sembradas en tu ruta, dejarás
de estar decepcionado.
Elimina
tus viejos pensamientos sobre el peligro que se cierne en torno a ti
y da la bienvenida de todo el bien que te pertenece.
Realización del Ser
Un
nuevo y prometedor mundo está a tu alcance.
Cuando
digo esto, me refiero a un nuevo yo.
Aunque
todo esto no es realmente nuevo, más bien, siempre ha estado ahí
sin que lo reconocieras.
Tú,
realmente, nunca quisiste hacerte ilusiones.
Nunca
esperaste en realidad, que podrías ser un magnífico Ser.
Por
eso siempre tuviste la mirada fija en la superficie, como si hubieras
sido pisoteado.
Ahora,
mira de nuevo, hazlo, para que puedas ver la realización de lo que
realmente eres.
Mira
hacia arriba, obsérvate a ti mismo, aunque sea furtivamente.
Tú
realización está de puntillas arriba tuyo.
La
realización de tu Ser está a punto de saltarte, para entrar en ti.
Tú
serás atrapado por un nuevo entendimiento.
Vas
a ser clarividente, dejarás de escuchar a todas las voces que no
hablen la verdad acerca de ti, sean pasadas o presentes, exteriores o
interiores.
Dejarás
de oír tu propia voz y la de aquellos que desconozcan tu propio
valor.
Espejo de la Verdad
Ahora
estás empezando a mirar hacia arriba.
Tú
estás levantando los ojos, porque así verás más alto.
Sólo
busca en los lugares correctos, hazlo en el Espejo de la Verdad.
No
temas, porque no te verás cegado por la luz brillante de tu Ser.
Anúncialo
cuando veas el brillo de tu propia luz.
Tú
luz nunca ha sido tenue, es sólo que tú y el mundo lo creían así.
El
mundo siempre se pensó a sí mismo con inferioridad y, por lo tanto,
lo hizo igual contigo.
Podría
ser exacto decir que se te ha presionado y agobiado, durante toda tu
vida, para que no eleves tu mirada.
Visión y sabiduría
¿Cómo
podría el mundo haberlo entendido?
El
mundo carecía de la visión y la sabiduría.
Todo
el mundo estaba equivocado, ¿me
entiendes?
Nadie
quería remar contra la corriente, porque no querían hacer olas.
Tú
ahora simplemente, ¡Rema
hasta la roca!
¡Encuentra el ritmo de la vida!
¡Bien
por ti! ¡Tu tiempo ha llegado!
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