Una metáfora de la Aurora

Heavenletter # 4845 Publicada el: 01 de marzo 2014

Dios dijo:

Lo que Yo Soy, lo eres tú y esto que digo no son sólo palabras.

Amados, Yo no trazo una línea.

Desde mi perspectiva, los amo a todos y cuando me dirijo les hablo a todos como uno.

Unidad

Tú y yo somos uno y al igual que todas las demás formas que consideran como otros, somos Uno y con ellos hablo también.

Estoy inmerso en la Unidad y dondequiera que voy está la Unidad.

En realidad, no voy a ninguna parte, permanezco siempre en la Unidad.

Estoy hundido profundamente en la Unidad.

Me erijo en la Unidad, sin embargo no me ocupo del Proceso del Levantamiento, porque me elevo por la virtud del Ser.

Proceso de recordar

Tú tampoco estás realmente en el Proceso de Levantamiento, en realidad estás en el Proceso de Recordar.

Cuando te elevas en ti mismo, no es algo que tengas que aprender o enseñar.

Considera que a medida que el tren sube, lo haces tú también.

Sólo piensa que estás en un tren con otro nombre, tal vez, se denomine tratando de manejar, luchar,  vivir y soñar.

Querido, estás buscando lo que ya eres, Tú eres mi Yo.

Yo Soy tu destino

Tú estás en un crucero y todavía estás pensando que la travesía está atracada.

Mientras que sigues imaginando que estás anclado aquí en la Tierra, tú estás navegando a toda vela.

Tú anhelas contar con una nave para ponerte en marcha cuando, en realidad, ya llegaste a destino.

Yo Soy tu destino, el cielo es tu destino y la Unidad es tu puerto de llegada.

No es a fuerza de voluntad que te despertarás y llegarás hasta dónde ya eres o si lo prefieres a la Unidad.

La Unicidad puede ser simple, es rica.

La Unidad es un pozo profundo, es la altura más lejana.

Amados, en este momento están rayando en el horizonte.

Tú estás muy cerca del horizonte de la conciencia y no es a fuerza de voluntad.

¿Te das cuenta de tu autorrealización?

La autorrealización no es un acto forzado, tú no puedes hacer que suceda:

• No es algo que se pueda clavar en la existencia o en el conocimiento de tu existencia.
• Ya es un hecho consumado.

Sin embargo, tienes un gran deseo de ella.

El deseo es la brújula que te guía.

Deja que tu deseo se convierta en intención, así después puedas dejar de lado a la intención.

Pero ahora permite que tu intención haga el trabajo.

La autorrealización no es algo que debas hacer para que ocurra, implica a algo que debe pasar.

Amados, no hay necesidad, ni razón de esforzarse tanto.

Activar el deseo de realización

Ten en cuenta a tu deseo de realización, reconoce a lo que ya es como tu GPS, únicamente tienes que activarlo.

La autorrealización es el curso natural de los acontecimientos, no está a tus órdenes, ni tu conciencia es el comando.

Una vez que hayas orientado tu GPS, escucharás con facilidad, te resultará fácil y agradable caminar junto con ella. 

El florecimiento de tu conciencia es inevitable.

Cuando suceda, pasará lo tengas en cuenta o no, se parece a un amanecer.

Si ocurre lo suficientemente temprano se verá igual a lo que, podría llamarse, un atisbo del amanecer.

El amanecer en toda su extensión siempre vendrá, sin embargo, no te apresures.

Sin apresuramientos

No te puedes apresurar, porque los amaneceres aclaran cuando alborea.

Cada amanecer tiene su propio reloj.

Puede ocurrir de repente, no hay un reglamento y cuando lo haga frente a ti, podrás tomarle una foto.

Esta metáfora de la madrugada se quedó corta, porque muy rápidamente amaneció y la mañana ya está ante Uds.

Cuando la Autorrealización surge, lo hace de par en par y se queda, además, siempre ha estado contigo.

Sin embargo, ahora que pienso en la metáfora de la madrugada, puedes trabajar y hacerlo bien, para que crezcas cada vez más en conciencia, hasta que tu ego empequeñezca y deje de ser una consideración más.

Tú eres el amor, el amor sin límites.

Tú y yo siempre estuvimos juntos.

Ahora ya lo sabes.