Heavenletter # 4833 Publicada el: 17 de febrero 2014
Dios dijo:
Escuchas que te dicen muchas
veces: “Vamos, libérate del pasado, no lo adjuntes”
Por supuesto, que si te
aferras al pasado no avanzarás.
Te mantendrá atascado y
puedes quedar atrapado en él, de tal forma que carecerás de toda idea sobre
eso.
Lo que tú no sabes es
que, lo inconsciente del pasado, te hace repetir
patrones que no te sirven.
Cuando algo te molesta, la
percepción del malestar la justificas y atribuyes a acontecimientos externos.
Pero, el malestar
proviene de eventos internos.
Recuerdo inconsciente
Cuando conoces a alguien
por primera vez, puedes sentirte cómodo o incómodo.
Ese alguien puede recordarte, inconscientemente, a un maestro, tía, madre o padre,
hermana o hermano, ya que la memoria oculta es la que
está reaccionando.
Amado, esto no es sólo
una teoría, porque todo el mundo o cualquier persona, al igual que tú, no tienen
la pizarra en blanco.
A veces, puedes sentirte
familiarizado con algún momento de tu vida y celebras a un acontecimiento con una
fuerte opinión, sin embargo más tarde, puedes hacerlo con un criterio
diferente.
Cambios en la forma de pensar
Durante la marcha, no
siempre conservas la misma dirección o tendencia, entonces:
- Alguna vez, pudiste desaprobar algo, pero ahora lo apruebas;
- O, tal vez, alguna vez aprobaste algo que ahora no lo reconoces.
Esto podría ser debido a
una reversión total o parcial en tu forma de mirar las cosas.
Cualquiera sea el caso y
el momento, a nivel consciente, puedes estar menos o más abierto o completamente
cerrado a una forma de pensar.
Tal vez hayas nacido en
una familia con ciertas ideas y, en un nivel consciente, ya no abrazas esas
ideas o te opones a esos conceptos familiares, por lo tanto, ahora, tus ideas
tienen más sentido para ti.
En estos asuntos, cuando
son conscientes del cambio en la forma de pensar, probablemente lo vean como crecimiento,
debido que superaron algo.
Una cuestión de razones
Cuando se trata de individuos,
probablemente, se te dificulta saber de dónde viene tu preferencia o aversión.
Proviene desde dentro de
ti, incluso, cuando piensas que no sabes.
Tú reconoces, tanto de
ida como de vuelta, el aumento o disminución del aprecio hacia alguien.
Tú lo sabes y puedes o
no pensar en las razones.
Pero, independientemente
de lo que puedas considerar, no es una cuestión de razones, sino de un cambio en
tu corazón.
La respuesta inicial
vino desde ti, sin embargo, tú no sabes dónde está.
Tampoco es necesario
saber la procedencia, ya que puede incluir a un hecho de la infancia:
- Quizás ese alguien fue poco amable contigo;
- Pero otra persona lo fue mucho más;
- Tal vez hay algo en esa persona que te encontraste ahora y que no tiene nada que ver con tu pasado;
- Puede recordarte a otras personas poco amables.
Cualquiera sea el
recuerdo que evoque tu memoria, reaccionas en consecuencia.
Razones mentales y del corazón
Pero, todo esto no es
una idea nueva para ti, porque la conciencia de la mente subconsciente o
inconsciente es comúnmente aceptada.
En cambio, tu corazón
recibe un mensaje de bienvenida o rechazo y sólo esto le basta para saber qué es
lo que sientes.
Piensa en todas las
razones lógicas que desees, en tu corazón, hay algo que te dice sí o no.
Esto no es una teoría,
es lo que sucede en el mundo y te estoy hablando acerca de las actitudes que
poseen.
Menciono todo esto para
que tú no tengas que asignar razones intelectuales o de defensa para lo que
sientes.
Crecer fuera del pasado
Reconocerás que estás
creciendo, cuando llegues al punto de encontrarte con una persona conocida o extraña y no lo asocies con el pasado.
Así es como creces fuera del ropaje del pasado y al hacerlo es porque estás en una unión muy estrecha con Mi Corazón.
Amados, todo en el mundo
es una idea y las ideas son factibles de cambiar:
Tú eres el único que puedes cambiar
A las viejas ideas que te
mantienen fuera del rumbo.
¡Ahora abraza, desde el corazón,
a las nuevas ideas
que te estoy ofreciendo!
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