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martes, 5 de agosto de 2014

Respeto Infantil

Mensaje Maya Día 197 Caban 2



Saludos, soy Caban con el Tono 2:



El aspecto del Amor que nos gustaría hablar hoy es el del Amor adolescente.
Bienvenidos y gracias por compartir su tiempo con nosotros.

Hoy nos gustaría hablar sobre el tema del Amor.

En toda la Creación, existen muy pocos lugares con la capacidad de amar en tantos niveles como lo hacen los humanos.

El aspecto del Amor que nos gustaría hablar hoy es el del Amor adolescente.




Crecimiento adolescente



Los padres muchas veces desalientan el Amor adolescente, por temor que sus hijos no sigan los sueños de los padres o la hija quede embarazada.

Les sugerimos a todos los adultos que se abstengan de burlarse de un adolescente enamorado, para evitar distanciamientos, enojos o cualquier tipo de malestar con los hijos.

Muchos padres, en el afán de evitar a sus hijos el dolor que sufrieron cuando eran jóvenes, los sobreprotegen.

El resultado es que algunos adolescentes se niegan a muchas experiencias por temor.

No se les inculca la suficiente confianza, con el respeto necesario, para que tomen decisiones que les permitan vivir una vida plena.

Su crecimiento puede truncarse, porque no aprenden a resolver sus problemas o a decir “no” dentro de sus propios parámetros.

Hay muchas historias trágicas, en las que los adultos, por un sentido de prevención, obligan a sus hijos a adherirse a normas sociales, basadas en fundamentos distintos al de un adolescente.

Los nutren con temores y códigos de creencias de adultos.




Elección de amigos



Los padres deben permitir a los jóvenes, elegir sus amigos, sin tomar decisiones por ellos, ni tratar de influenciarlos en sus opciones amistosas.

Más bien, mediante una enseñanza desde muy temprana edad:

  • Aleccionarlos sobre cómo actuar adecuadamente.
  • Instruirlos en la resolución de sus propios problemas, para permitirles experimentar el resultado de sus decisiones.

Cuando lleguen a la adolescencia, tendrán las habilidades necesarias, para elegir los amigos y las actividades recreativas que sean de su mejor interés.

Nuestra esperanza es que los padres, maestros y modelos a seguir, integren estos mensajes en su Ser, para equiparse en la crianza de los niños.




Eliminación de la negatividad



Como adultos, a medida que liberan patrones de pensamientos negativos, pueden cambiar hábitos indeseables y códigos de creencias perimidos, con un mejor ejercicio del Libre Albedrío.

¿Se imaginan si hubieran integrado estas herramientas en la juventud, lo diferente que serían sus vidas en este momento? 

¿Se imaginan la singularidad de sus vidas si hubieran sido escuchados? 

¿Se imaginan si hubieran aprendido a decir “no” a todo lo que no sienten bien para Uds.? 

¿Se imaginan la diferencia en sus vidas si con cada paso, hubieran sido apoyados por la familia? 

¿Se imaginan autoprotegiéndose de cualquier daño?

La incidencia de violaciones y abuso que impregnan sus culturas, no existirían en estos momentos.

Los perpetradores carecerían de víctimas, porque los niños no depositarían confianza en personas abusivas.

Incluso, de existir, serían pocos, además tanto los niños, cómo sus padres, no tendrían miedo de enfrentar al agresor.




Burlas y castigo



Algunas interacciones en tiempo presente con los demás serían distintas, si a los dos años de edad, ante la inconveniencia de algún dicho, se los hubiera educado para que callaran, sin reprimendas y con un mayor interés en el niño.

Cuando los niños son ridiculizados o castigados por hablar lo que piensan, aprenden rápidamente que afirmar su verdad no es siempre una buena idea, así es como se los instruye a decir mentiras piadosas.

La vida de una gran mayoría sería diferente, si los hubieran animado a expresar las emociones desde la niñez.

Con frecuencia a los niños se les enseña que sólo los bebés lloran.

Cuando los niños sienten ira, a menudo se los anula, ordenándoles: “¡Ve a tu cuarto!”

Muchas veces los niños muestran una condición natural por el baile y el canto, pero los adultos los desdeñan continuamente, para acallar y calmar las inquietudes artísticas.




Formación códigos de creencias infantiles



En el momento más importante de la vida entre un padre e hijo, para afianzar el vínculo, los niños son enviados a la enseñanza preescolar.

Antes de la inscripción, son sometidos a una serie de vacunas que causan estragos en el sistema inmunológico de los niños.

Quedan expuestos a miríadas de enfermedades, por manipular y llevar a la boca objetos contaminados por niños enfermos.

El número y formación de maestros de preescolar son inadecuados.

No están capacitados para dar a cada niño atención, Amor y apoyo necesarios, lo cual es lamentable.

Los niños de esta edad necesitan saber que pueden contar con cuidadores que los protejan.

En lugar de recibir este apoyo, los padres los inscriben en las escuelas, a menudo, sin consultar con el niño o mensurar si están listos para asistir a un centro educacional.

Como resultado, el niño se da cuenta que no tiene otra opción y, con frecuencia, durante el primer tiempo o más, se siente abandonado cuando el padre lo deja.

Para un niño ingresar a un lugar lleno de extraños, sin saber qué se espera de él, sin la comprensión del tiempo y sin saber cuando su mamá o papá volverán, es traumático y desolador.

La mayoría de los niños, antes de entrar en el jardín de infantes, ya han elaborado códigos de creencias tales como:

“Los niños son observados, pero no escuchados”. 

“Los niños más grandes no lloran, sólo lo hacen los bebés”. 

“No tengo control sobre mi vida”. 

“En cualquier momento mis padres me pueden dejar”. 

“Nadie me escucha”. 

“Enojarse es malo”. 

“No es bueno mostrar las emociones”. 

“La gente se ríe de lo que digo”. 

“La escuela me enferma”, etc.

¿Algunos de estos códigos les resultan familiares a Uds. como adultos?

Estos son los códigos de creencias que la mayoría de los niños construyen a través de sus pensamientos, palabras y acciones, en base a lo que se les inculca desde temprana edad.




Sistema Público de Educación



Cuando el niño entra en el jardín de infantes, se le enseña:

Primero: a competir. 

Segundo: a juzgar y clasificar, porque se los etiqueta en base a la capacidad para realizar las tareas propuestas. 

Tercero: se los obliga a permanecer sentados durante largos períodos de tiempo, algo antinatural y abusivo. 

Cuarto: se les exige cumplir con nuevas reglas, que pueden ser muy debilitantes. 

Quinto: se les inculca a renunciar a la autoexpresión, para sucumbir a la conformidad.
El sistema de educación público se estableció para crear minirobots que cumplan las tareas futuras de una sociedad industrializada.

Los niños se ven obligados a aprender habilidades, que les permitan ser un miembro social productivo .

Cuando hay recortes presupuestarios en el sistema, lo primero en ser eliminado de los planes de estudios, son las clases de creatividad como: arte, música y educación física.

Estas actividades creativas son consideradas como las menos importantes, pero en realidad, son las habilidades que equilibran al hemisferio derecho del cerebro con el hemisferio izquierdo.

Los niños aprenden mejor en la naturaleza, sin embargo, a menos que sea parte del plan de estudios de ciencia o algo específico, la única interacción que tienen con la naturaleza es en el patio o en la parada del autobús.

La gran mayoría de los niños no saben que la leche viene de las vacas, que los huevos proceden de gallinas, que las hamburguesas son la carne de vaca o que las verduras y las frutas son cultivadas por los agricultores.

En algunos países ya se instrumentó el ingreso a preescolar a los 7 años, que es la edad ideal para todo ser humano, porque ya alcanzó la suficiente madurez mental y emocional para absorber conocimientos.




Consolidación de códigos de creencias



La mayoría de los padres desconocen o desestiman el nivel de toxinas añadidos a los alimentos para hacerlos crecer, madurar, conservar y colorear que ingieren.

Sin embargo, todos los días, estas toxinas son cargadas en sus cuerpos y los de sus hijos.

Actualmente se preguntan, por qué aumentó la tasa infantil de enfermedades como diabetes, autismo, déficit de atención y leucemia.

Así, cuando los niños entran a la escuela primaria, lo hacen con:

Muchos de los códigos de creencias antes mencionadas, firmemente consolidados. 

Con cuerpos flácidos por falta de ejercicio y consumo de alimentos llenos de sustancias tóxicas que debilitan el sistema inmunológico. 

Represión de la ira, por no poder expresarla. 

Percepción de un sistema escolar abusivo, sin nadie que los proteja. 

Lentitud en la reacción, por comer abundantes alimentos dulces y tomar refrescos que les aumentan artificialmente la energía. 

La apelación a conductas extravagantes para llamar la atención de los adultos, sin conseguir ser escuchados. 

Una frustración que los desborda y abate.

En la adolescencia, la rebeldía propia de la etapa, en algunos casos, los rebalsa y se manifiesta con inasistencias injustificadas, visitas reiteradas a la oficina del director, violencia, malas compañías, tabaco, alcohol, drogas y, en algunos casos, detención en centros de menores.

Sin embargo, aún así, no reciben el Amor, apoyo y atención que necesitan y merecen.

¿Es de extrañar que los embarazos adolescentes sigan aumentando?




Respeto a los niños



Entendemos que las presentes palabras no les puedan agradar.

Sin embargo, si vienen leyendo desde el comienzo nuestros mensajes, ya están preparados para recibir verdades sobre los males sociales, que los está haciendo colapsar.

Queremos decirles a Uds. que son padres, maestros y modelos de conducta para los niños, que presten atención a la forma que influyen en sus códigos de creencias:

Trátenlos de la manera que les hubiera gustado que sus padres lo hubieran hecho con Uds. en la infancia y más adelante.

Cada uno de Uds. tiene la capacidad de ser una gran influencia sobre un niño, incluso si no conviven en el mismo hogar.

Una simple sonrisa puede hacer maravillas, para que no se sientan invisibles. 

Cuando conozcan a otras personas, presenten al o los niños, también. 

Traten a los niños con amabilidad y respeto. 

Eviten los comportamientos paternalistas en una charla, como palmaditas en la cabeza o el hombro. 

No se burlen, ni ridiculicen sus inquietudes.

Animen a los niños a soñar su vida desde una existencia espiritualmente sana. 

No traten de influenciarlos con amenazas, premios u otras artimañas, para que cambien de parecer en sus elecciones. 

Si piden consejo, háblenles de manera clara y concisa, haciéndoles saber que otras personas tendrán diferentes opiniones. 

Anímelos a intercambiar opiniones con personas que tengan puntos de vista diferentes, para que decidan en consecuencia. 

Libérense de todos los comportamientos relacionados con el género, vistiendo a los niños de azul y con juegos masculinos y a las niñas de color rosa y con juegos femeninos.

Permitan a sus hijos elegir sus carreras respetando su vocación, sin etiquetarlos con roles de género, tales como enfermería, peluquería, etc. para las mujeres y mecánica, ingeniería, etc. para los niños.

Traten a los niños con respeto, escuchen sus palabras, anímenlos a resolver sus problemas, para que les permitan florecer.

Esperamos que estas palabras toquen sus corazones y los ayuden a hacer los cambios que les permitan sanar y reconstruir sus bases de creencias.

Hermanos, profundicen en sus conocimientos, para mejorar aquellos que lo necesiten, para retroalimentarse a sí mismos y a los niños que los rodeen.


Selamet! Caban 2


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