" Una estrella creciente - CAMINO A LA GRACIA DE DIOS

martes, 25 de febrero de 2014

Una estrella creciente

Heavenletter # 4835 Publicada el: 19 de febrero 2014



Amados, aún no pueden comprender verdaderamente lo que Mi Voluntad significa, porque tienen sus propias versiones y en todas ellas se imponen culpas a sí mismos.

Dios dijo:



Amados, no necesito imponer mi voluntad sobre la de Uds.


Esta es una línea muy fina para pisar, sin embargo te digo que sigas mi Voluntad, no te la impongas a ti mismo.



Tú aún no puedes comprender verdaderamente, lo que Mi Voluntad significa, porque tienes tu propia versión.

En todos los casos, se imponen culpa sobre sí mismos.


No te juzgues, no cargues inútilmente tu conciencia, sólo reconoce y asume que tú eres mi amado.






Sin Piedras en el camino



Si un niño por error rompe algo y no está en peligro, su padre puede molestarse, pero no significa que tirará a su hijo.


La diferencia entre el padre y Yo consiste que yo no me enojo:


  • ¿Qué clase de Dios sería si me molestará por todo?


  • ¿Quién sería entonces Yo, más allá de tu comprensión y entendimiento, si me enojará por todo?


  • Si me enojara por todo tal como piensan, ¿no creen que serían demasiados humos por ser Dios?






Sin enojos ni condenas



Tienes que saber que Yo no me enojo, no te juzgo, condeno o penalizo.


Tampoco te tiro piedras en el camino para que tropieces.

Debes saber que en tu trayecto pueden haber piedras, incluso puedes encontrarlas y tropezar con ellas, pero debes entender que no Soy Yo quién las coloca o las tira bajo tus pies.

Si están ahí y las ves, debes buscar un camino alternativo para esquivarlas.

Posiblemente cuando planeas un viaje por la vida, los obstáculos que aparecen ya estaban allí de antemano.

Lo que quiero que sepas y,  ya lo sabes a un nivel muy profundo, es que Yo:

  • Nunca te arrojaría bajo las ruedas del tren.
  • Nunca voy a mantenerte fuera de los Cielos.
  • Nunca me llevaría lo que te fue dado.


Lo que es tuyo es tuyo.





Sentimiento de pérdida



En el mundo, cuando se percibe que hay pérdida, se esfuerzan para que todos los números cuadren en el total y determinar que es pérdida o ganancia.

Considera seguir Mi Voluntad para llegar a conocerte mejor a ti mismo:

  • No importa cuántas mal llamadas vueltas des, tú vas a alcanzar tu destino, porque es tuyo.
  • No importa la velocidad que le imprimas, porque sea lenta o rápida, igual llegarás a destino.

Todos los que vivieron y viven en la Tierra, llegan al mismo destino.

Algunos viajes pueden retrasarse, sin embargo, tu destino es tuyo y no importa cuántos atrasos puedas tener.

Simultáneamente te digo que no hay tiempo que perder, pero tampoco hay prisa, porque todo está asegurado.

Se quieres llevar la cuenta cuando el camino te resulte sinuoso y lento y así calcular el tiempo necesitas, te digo que es innecesario, porque igual te llevará al lugar donde te espero para reencontrarnos.







Dejar el pasado



Cuando hay desorden interior, no puedes permanecer adentro y si permaneces libre te permitirás elevarte.

Amado, en realidad nada te puede detener, porque continuamente te estás desplazando hacia adelante.


Con toda franqueza te digo que dejes ir al pasado, ya que la autorecriminación se monta en tu espalda.

Ámate a ti mismo e impúlsate hacia adelante, para que no te surjan obstáculos.

Tú eres tu propio héroe, aunque el mundo te vea como un villano.

Sin embargo, eres tú el que hace girar la moneda, aunque sea de diez centavos en estos momentos.


Nunca es demasiado tarde, ni demasiado pronto, ya que tú puedes avanzar milenios en un día.






Irrealidad del tiempo



El tiempo no es real, pero el espacio si es real.



El tiempo y el espacio no celebran juntos.

Salvo que tú lo permitas mediante el uso de un tiempo imaginario y ubicando a tus dioses en el espacio, ¿no es cierto esto?


Amados, sin importar el curso, empiecen desde cualquier punto, pero vengan en mi dirección, encuentrenme en sus conciencias.



Queridos presten atención y véanme que estoy aquí, frente a Uds.



Me vas a reconocer fácilmente, será un deleite y no una sorpresa, porque nunca has estado sin Mí:



Tú eres una estrella en ascenso.
Todas las estrellas se elevan.
Tú vas a subir para el deleite de todos.


Bienvenido a casa, querido hijo.

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